Para el Chef de Pedras, el escultor estradense Manuel Tosar, el sábado fue un día muy especial. No es para menos. Este apasionado de la gastronomía y la escultura en piedra -estudió Dirección de Cocina en el CIFP Compostela y actualmente perfecciona su talento artístico con la piedra en la Escuela de Cantería de Poio- le sirvió una de sus creaciones al reputado chef Martín Berasategui, distinguido con 8 estrellas Michelín.

Es una pieza exclusiva diseñada para el restaurante Eme Be Garrote, inaugurado en 2013 en una antigua sidrería de San Sebastián (Guipúzcoa) y que ofrece a precios asequibles platos de cocina de autor de tal calidad que le han llevado a ser seleccionado por la A.A. Real Academia de Gastronomía.

Tosar y Berasategui se conocieron el pasado año en la celebración del cincuenta aniversario del CIFP Compostela, donde el escultor -natural de Ouzande- exponía una colección de piezas: uno de sus famosos pimientos, un ajo y un pez, entre otros elementos vinculados con la cocina. Estas esculturas llamaron la atención de Berasategui y comenzaron a conversar. Tosar le explicó al chef vasco que había hecho la mili en Vitoria, que tenía amigos en Lasarte y que, retirado de su empleo como sargento de Telecomunicaciones de las Fuerzas Armadas, había estudiado Dirección de Cocina en Lamas de Abade y ahora estudiaba en la Escuela de Cantería de Poio, perfeccionando ahí su vena artística escultórica. Le contó también que, dada su pasión por la cocina, empezó a apostar por esculpir piezas vinculadas a ese sector, como las que expuso en Abastos 2.0 del Mercado de Abastos de Santiago y en otros prestigiosos establecimientos de restauración.

Convinieron en que Tosar le hiciese un vaciado del brazo a Berasategui para confeccionar una pieza de diseño exclusivo para uno de sus restaurantes. Y así fue. La pieza en cuestión está confeccionada en piedra. Su parte frontal evoca el brazo de Berasategui y parte de su torso, con una chaqueta de chef. Por la parte posterior, muestra en acero cortem un perfil del prestigioso cocinero con un gorro y una cuchara, que constituyen su logo.

Fue para Tosar un proyecto muy ilusionante. Porque, apunta, Martín Berasategui es "toda una referencia" y, para él, es todo un honor poder servirle en bandeja de madera esta creación. Para él, Berasategui es "lucha, fuerza, pasión, coraje, garra y tesón". "Me siento muy identificado con su espíritu de trabajo", concluye.