Uno de los enclaves turísticos de la comarca de Deza, el Mosteiro de Carboeiro, vuelve a ser digno de estudio por sus singulares características. En esta ocasión, la iluminación del espacio ha llevado a que un estudioso se fijase en la construcción y lo adentrase en un proyecto junto con otros santuarios de gran reputación. El templo del monasterio de San Lourenzo de Carboeiro figura entre las iglesias de la Edad Media que forman parte de una tesis doctoral sobre la iluminación natural. El título de este estudio es La iluminación natural del espacio eclesial en los reinos hispánicos de la Alta a la plena Edad Media e incluye a diversas iglesias y catedrales entre las que se encuentra la Catedral de Santiago de Compostela.

José Puente Martínez, encargado del proyecto, lleva dos años y medio trabajando en este estudio que se encuentra ya en fase de redacción. Hay que hacer especial mención al significado que ostenta la luz en los templos religiosos para entender también la importancia para los santuarios. La luz es asumida como símbolo de la revelación de Dios y de su presencia en la historia

Este doctorado de la Universidad Complutense de Madrid recaló hace unos días en el monasterio de Carboeiro para hacer mediciones y tomar fotografías que se incorporaran al minucioso trabajo sobre la iluminación en templos construidos básicamente entre el Siglo VI y VII hasta el año 1200. Junto a Carboeiro figuran otros templos de la comunidad gallega como Santa Mariña de Aguas Santas, Santa María Xunqueira de Ambía, Armenteira, San Martiño de Gargantáns y la Catedral de Santiago. Son en total 85 empleos de toda España, la mayoría situadas en la zona norte, aunque también figuran en la tesis templos como Santa Lucía del Trampal (Cáceres) y otra iglesia en Toledo. Dice que lo que más le sorprende de Carboeiro es su ubicación. "Lo que me llamó la atención primero fue el enclave, en medio de la naturaleza. Como también el paso de ruina a un edificio que ahora mismo está consolidado y con un buen criterio, manteniendo la estructura y conservando prácticamente todas las ventanas originales", señala destacando también que "se mantiene sobre todo el diseño de la iluminación original y unido a este paraje parece un templo construido directamente a la creación, inmerso en la naturaleza donde oyes el río, los pájaros?".

Con esta tesis, Puente Martínez hace una lectura que no se realizara hasta lo de ahora "desde la Edad Media, porque no hay datos de cómo se iluminaban entonces las iglesias", añade.

Advierte de denominadores comunes como una luz muy bien trabajada "con localizaciones de las ventanas muy cuidadas, que son la causa última que permite el acceso de la luz". Los vanos abiertos en la fábrica, en su altura, dimensiones y mismo la orientación de los templos son algunas de las análisis que forman parte de sus tesis. De las iglesias gallegas destaca también las celosías como elemento característico.

De Carboeiro señala que al entrar a la iglesia de San Lourenzo "nunca pierdes la referencia de la capilla radial axial, la perspectiva del vano, de la luz, que es Dios y está presente siempre deslumbrando sobre el Altar, como ya lo anuncian las ventanas de presbiterio", indica José Puente.

La pasión de este doctorado graduado en Geografía e Historia con un Máster en Estudios Avanzados en Historia del Arte Español -en la especialidad de Medieval-, quizás le venga también de su etapa como iluminador de teatro. "Ahora mismo estoy verificando datos, tomando fotos de la iluminación natural... un trabajo que a veces cuesta entender porque la gente no está concienciada. En la Edad Media tenían ya técnicas que permitía hacer ventanas muchos mayores pero no las abrían porque se buscaba una atmósfera de recogimiento en las iglesias".

Sin iluminación eléctrica

De todas las iglesias que forman pare del estudio, Carboeiro es junto con San Miguel de escalada, en León, de las pocas que quedan sin iluminación eléctrica. "Hay otras donde la iluminación es absolutamente descarada, La luz contamina y sobre todo en estos edificios que no estaban pensados para soportar este tipo de iluminación. Cuando uno visita un edificio de estos tiene que entrar en su atmósfera", señala indicando la singularidad del templo silledense.