"Tenemos un proyecto minero y metalúrgico moderno y sostenible para Galicia", destacó ayer el consejero delegado de Atalaya Mining, Alberto Lavandeira. La firma Cobre San Rafael, empresa que promueve Proyecto Touro para la reactivación de la producción de cobre en la mina situada entre los municipios de Touro y O Pino, explicó ayer los detalles de su proyecto durante una visita de medios de comunicación a las instalaciones actuales de la mina. Lavandeira subrayó también que "metales como el cobre son imprescindibles e insustituibles para un mundo que va hacia las energías renovables y en el que Galicia tiene un papel importante que cumplir".

Según se indicó ayer, Cobre San Rafael hizo repaso de las principales magnitudes de la propuesta minera presentada a la administración gallega: 220 millones de euros de inversión, 15 años de actividad y 400 puestos de trabajo directos. En esta línea, Alberto Lavandeira explicó el impacto positivo de las operaciones en Touro, confirmando las cifras de empleo recogidas en el proyecto. "En Riotinto hay en la actualidad 500 trabajadores, de los que el 90% tienen contrato indefinido y el 70% son personas locales", indicó.

Tras apuntar al "compromiso total de transparencia de la empresa" y declararse "abiertos a cualquier pregunta", desde la empresa se aseguraron que las claves del proyecto minero pasan por "vertidos cero, control ambiental y una gestión de estériles conforme a las mejores prácticas y a la ley española, una de las más estrictas del mundo".

El recorrido ofrecido ayer por Cobre San Rafael abarcó distintos puntos del proyecto minero. Según se indicó, se visitó la corta de Arinteiro, lugar en activo para la extracción de áridos, además de asistir a uno de los sondeos que se están realizando en terrenos de propiedad privada. Por último, la visita contempló el Monte de las Minas, desde el que se puede observar parte de la zona que incluye el proyecto.