La Central Agropecuaria de Galicia registró ayer un repunte en la afluencia de ganado bovino y en su facturación. Las 1.110 reses que accedieron al mercado son la cifra más alta desde el 16 de enero, cuando se habían rebasado las 1.200. Al final, fueron 1.058 las cabezas adjudicadas por un montante global de 480.769 euros.

El volumen de transacciones registrado es el segundo mayor del año, solo superado por el más de medio millón de euros facturados el 9 de enero -primera sesión tras las fiestas navideñas- por la comercialización de más de 1.300 reses. El incremento de la cifra de negocio se debe, en gran medida, a las moderadas subidas experimentadas por los terneros de recría y el vacuno mayor en sus cotizaciones medias. Los primeros promediaron 227,72 euros, es decir, 3,29 más que hace una semana, y las vacas de desvieje ganaron 5,86 euros y alcanzaron los 883,71. En cambio, los terneros carniceros se depreciaron por encima de los 9 euros en su media global, que fue de 723,22. Llama la atención el desplome de precios de los terneros frisones, sobre todo en las hembras, una de las cuales se pagó a solo 15,5 euros.

En las mesas de precios, las subidas fueron generalizadas. El porcino cebado incrementó su valor -aunque menos que en las semanas anteriores-, en línea con el resto de Europa, cuyos mercados se apuntan crecidas de hasta 0,05 euros, en los casos de Holanda y Alemania.

En cuanto al conejo, que sigue sin cotización en Galicia, la lonja de Madrid se mantiene estable en los 1,55 euros por kilo en vivo.