El Concello de Lalín dio comienzo ayer por la mañana a la colocación de cinco nuevas marquesinas en otros tantos del núcleo urbano y del rural. Concretamente, los elementos se instalaron en las calles Areal, Corredoira y Donramiro, además en la Avenida de O Montserrat y en la parroquia de Madriñán.

El concejal de Obras, Francisco Vilariño, asegura que las marquesinas fueron colocadas en todos aquellos puntos en los que existía demanda vecinal, en muchos casos debido a que escolares precisaban estas estructuras para protegerse mientras esperan por el transporte. Ante una gran demanda de usuarios existente en algunas zonas, el concejal reconoce que alguna marquesina instalada incluso podría quedar pequeña, "pero son los medios con los que contamos", señala. Por eso, dice, el el futuro el Concello tratará de sustituirlas por unas de mayor capacidad. Los nuevos modelos son de 2,5 metros de largo, de cristal con partes de acero lacado de color blanco y con tejado de vinilo. Además, y como principal característica, destaca su cierre frontal, un elemento que las hace completamente funcionales y propicias para que los usarios se resguarden de las inclemencias meteorológicas. Vilariño remarca que la instalación de estos elementos se suma a la sustitución, el año pasado, de otras siete marquesinas y los arreglos llevados a caboi en más de una quincena de parroquias del término municipal.