El Rincón de la Mariposa (Avenida da Estación, 8, bajo) de Lalín acoge esta tarde, a partir de las 19.00 horas, un Encuentro Empresarial de Criptomonedas a cargo de Firstcoin Team. Dos serán los ponentes de una cita abierta a todas las personas interesadas en conocer a fondo la nueva economía. A Víctor Feijoo le acompañará Sonia Sánchez Becerra, experta en la materia y, además, informática.
-¿Cuál es el objetivo de este tipo de charlas-coloquio?
-Yo pertenezco a la asociación de venezolanos de aquí, y junto a mi compañero Víctor, estamos dando charlas informativas por todas las asociaciones afincadas en Ourense para hacerles llegar la información necesaria. Mañana (por hoy) vamos a Lalín porque también nos lo han pedido.
-¿Cómo le explicaría a alguien poco ducho en temas económicos qué es una criptomoneda?
-Una criptomoneda no es más que un intercambio digital de valores entre dos personas. Es una moneda, que al igual que el dólar, pues te sirve para realizar el pago de un producto o de un servicio. Es un pago digital. El valor que tiene siempre se toma como referente al dólar americano, y la primera en salir al mercado en 2009 fue el bitcoin. Actualmente, en todo el mundo, hay más de 1.300 criptomonedas distintas. El número exacto no lo sé, pero incluso podría llegar a las 1.800.
-¿Hay reticencia a la hora de pasarse del dinero físico a la criptomoneda?
-Por eso son necesarias este tipo de charlas para que la gente sepa de qué se está hablando. Lo mismo pasó cuando comenzó el comercio electrónico por internet. Cuando aparecieron las primeras tiendas online como Mango o Zara, la gente se mostraba muy reacia a comprar por internet. Había miedo porque no se podía hacer el pago de persona a persona, abonar el producto y llevárselo, la gente tenía mucho miedo. Lo cierto es que todo evoluciona contigo o sin ti. La venta por internet, hoy en día, es un negocio millonario. Todas las marcas importantes del mundo tienen su tienda online porque la gente, con el paso del tiempo, fue recibiendo más información, aparecieron más plataformas dentro de internet seguras, y ya hoy por hoy se compra absolutamente de todo a través de la red. Entonces, la criptomoneda, igual que el comercio electrónico, es algo útil para realizar intercambios económicos. Es algo parecido al sistema PayPal, donde el dinero ni lo ves ni tampoco lo puedes tocar y, sin embargo, pagas igual. La criptomoneda también es una forma de pago, pero con la diferencia de que su valor lo obtiene en función de la oferta y la demanda.
-¿Qué riesgo existe de que nos puedan estafar con este tipo de pago digital si, como explica, su valor fluctúa tanto dentro del mercado de la oferta y la demanda?
-Las criptomonedas no están controlados ni por bancos ni por gobiernos, de ahí las reticencias y la precaución que deben de tener las personas. Lo primero que tiene que evaluar alguien que quiera invertir, porque al fin y al cabo estamos hablando de invertir y de un activo financiero, es que esa moneda sea pública, que esté en los mercados de criptomonedas existentes y especializados. El riesgo aparece cuando las personas se meten a hacer inversiones en ofertas iniciales de criptomoneda que aún no son públicas porque puede salir o no puede salir pública. Lo principal es que aparezcan en estos listados de mercados donde aparezca la fluctuación, su evolución de como va subiendo, como pasa con las bolsas de todo el mundo.
-¿Algún día las criptomonedas acabarán por sustituir al dinero contante y sonante?
-Como te decía antes, todo evoluciona mucho. Recuerdo que cuando se inventó el teléfono era impensable que hoy en día la mayoría de nosotros acabáramos hablando por un móvil. Los móviles terminaron por sustituir a los fijos. Aún quedan algunos de éstos en las casas porque siempre va a haber un público que no con el cambio. Otro ejemplo, fue la llegada del euro, cuando nadie nos preguntó si queríamos pasar de la peseta al euro. Todos tuvimos que hacerlo, nos gustara o no. Siempre va a haber gente que prefiera el dinero físico al virtual. Lógicamente, la criptomoneda no va a sustituir ni ahora ni en el futuro a la moneda fiduciaria como el dólar o la moneda de cada país. Primero porque su número es limitado. Por ejemplo, el bitcoin tiene un número limitado de 21 millones de monedas. Cuando se acaben no habrá más, y entonces al haber pocas se incrementará su valor. Cuando se acaba el dólar siguen imprimiendo papelitos. El primer billete de dólar salió en 1785 en Estados Unidos. Han pasado muchos años, pero seguirá.
-¿Por qué?
-Porque es la moneda fiduciaria del sistema. Y el sistema no va a cambiar. A pesar de que en internet circulan informaciones contradictorias sobre las criptomonedas, todos los bancos están desarrollando esta tecnología, y el producto financiero basado en esta tecnología. ¿Qué quiero decir con esto? Que el sistema va hacia a esa evolución porque es algo imparable. El cambio está ahí. No creo que sustituya al dinero tradicional, pero la idea es ofrecer información para que la gente sepa lo que hay.
