El Servicio de Medicina Nuclear del Hospital Clínico de Santiago ultima la puesta en marcha normalizada del nuevo tomógrafo por emisión de positrones de última generación, el PET-TAC Vereos, que mejora el diagnóstico y tratamiento de diversas dolencias, como las oncológicas, al portar "más rapidez y precisión". La gerencia sanitaria compostelana explica que esta incorporación supone "una radical mejora sobre el existente, que también fue pionero en su tiempo y cuya actividad asistencial se inició el año 2003", desde cuando ha realizado más de 19.000 exploraciones. Es el segundo en instalarse en España y el sexto de Europa.

El área sanitaria está inmersa en un plan de renovación tecnológica que afecta al 80% de la alta tecnología y gran parte de radiología convencional. El nuevo equipo PET, de última generación, "permite obtener imágenes de alta resolución espacial y alta sensibilidad, gracias a que dispone de nuevos detectores digitales y a la tecnología de tiempo de vuelo". Además, el equipo tiene incorporado un tomógrafo axial computarizado (TAC) con calidad de diagnóstico, "simplificando el registro anatómico de las imágenes PET y abriendo la puerta a nuevos tipos de exploraciones con respecto al anterior sistema".

"Este nuevo PET se interrelacionará funcionalmente con otros equipos de imagen del CHUS, buscando el nuevo y moderno reto de los hospitales: las unidades funcionales diagnósticas interdisciplinares, encaminadas a mejorar la calidad de la asistencia a nuestros pacientes", destaca el jefe del Servicio de Medicina Nuclear, Álvaro Ruibal. "En este reto, el ciclotrón, que está cerca -explica-, puede jugar un papel esencial en el desarrollo de nuevos radiofármacos que posibilitarán nuevas vías para el estudio de diferentes enfermedades, todo lo cual dotará a la sanidad pública gallega de unas posibilidades que no poseen otras comunidades".