La Consellería de Medio Rural ofrece una nueva línea de ayudas destinada a comunidades de montes y particulares con el fin de poner en marcha acciones silvícolas de prevención de incendios y en las que el Gobierno autonómico invertirá cerca de 7 millones de euros.

Estas órdenes permitieron destinar el año pasado casi 608.000 euros a 35 comunidades de montes y particulares de la comarca de Pontevedra, Marín y Bueu. Así, se benefició la comunidad de Cela en Bueu con 16.537 euros; cuatro comunidades de montes en Campo Lameiro (Couso, Redonde, Fragas y A Lagoa), con un total de 102.937 euros; 11 comunidades de montes de Cerdedo-Cotobade con una inversión de 158.940 euros; cinco comunidades de montes de A Lama (Seixido, A Lama, Xende, Escuadra e Antas) con 89.700 euros; la comunidad de Santo Tomé de Piñeiro en Marín con 10.036 euros; seis comunidades más de Pontevedra (Canicouva, Pontesampaio, San Vicente de Cerponzóns, Santa María de Xeve, Santo André de Xeve y Salgueiral) con 102.000 euros; dos comunidades de montes en Poio (Rega dos Agros y San Xoán), así como la Sociedade Galega de Actuacións no rural, con 84.500 euros en total. Otras comunidades de montes beneficiadas están en Ponte Caldelas, Paradela con 7.787 euros y Vilarchán con 12.271 euros; y finalmente Vilaboa con San Martiño de Vilaboa con 16.500 euros y Santa Cristina de Cobres con 6.697 euros. En total, las 35 comunidades actuaron sobre 357 hectáreas.

En la provincia de Pontevedra hubo 115 beneficiarios con un presupuesto de ayuda global de 2,3 millones de euros, y se trabajó sobre un total de 1.368 hectáreas.

Estas acciones silvícolas tienen como objetivo prevenir los daños acusados a los bosques por incendios, desastres naturales y para el incremento de la capacidad de adaptación y de valor ambiental de los ecosistemas forestales. Las ayudas, que pueden llegar al 100% de lo solicitado, están cofinanciadas por el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader) en el marco del Programa de Desenvolvemento Rural (PDR) de Galicia 2014-2020.

Los interesados tienen un plazo de un mes hábil para presentar sus solicitudes que pueden ser para realizar tratamientos silvícolas con la finalidad de prevención de incendios, es decir, la creación de descontinuidades verticales y horizontales de la cubierta vegetal y el control selectivo de combustible como son rozas, podas y rareos; o para realizar tratamientos silvícolas y plantaciones puntuales de determinados árboles, directamente vinculadas al incremento de los valores ecológicos de los bosques que no tengan carácter productivo.