El Concello de A Estrada transportó a lo largo de 2017 hasta la planta de tratamiento de residuos de la Sociedade Galega do Medio Ambiente (Sogama), en el municipio coruñés de Cerceda, 5.838 toneladas de basura que los vecinos de este ayuntamiento depositaron en los contenedores destinados a la recogida de desechos orgánicos. La cifra supone un incremento de 37 toneladas con respecto a los datos que la administración municipal baraja en relación a la recogida de la llamada "bolsa negra" en 2016, ejercicio en el que se transportaron hasta el citado complejo medioambiental 5.795 toneladas de basura procedentes del municipio estradense.
El volumen de basura orgánica generada en A Estrada, que el Concello estima en una media de 1 kilogramo por persona y día, hace que cada jornada el camión compactador parta hacia Sogama, a excepción de los domingos. Este vehículo especial realiza uno o dos viajes por jornada, una actividad que explica que el gobierno haya reservado en los presupuestos municipales para este año una partida de 35.000 euros destinada a realizar reparaciones en este camión.
Los cálculos que maneja el gobierno apuntan a que los estradenses generan una media de 20 toneladas de basura orgánica cada día. El alcalde, José López, y el edil delegado de Medio Ambiente, Juan Constenla, explicaron ayer que los meses de mayo y agosto son los que reflejan un mayor incremento del volumen de basura que A Estrada envía a Sogama para su tratamiento.
Ya en términos económicos, la gestión de estos residuos orgánicos en la planta de Cerceda supone para las arcas locales alrededor de 450.000 euros al año. A este importe ha de sumarse el gasto que representa la recogida de la basura depositada en los contenedores verdes, un servicio que la administración estradense gestiona de forma directa. "La recogida cuesta otro tanto", explicó ayer el regidor local, que apuntó que los presupuestos municipales reservan para prestar este servicio básico para los ciudadanos 850.000 euros al año.
Tradicionalmente esta prestación es deficitaria, en la medida en que el Concello gasta más en ofrecer el servicio de lo que se recauda por la vía del cobro de la tasa correspondiente. No obstante, la situación ha mejorado mucho a raíz de las últimas inspecciones en el padrón de la recogida de basura.
Tras la campaña de actualización que se ha venido ejecutando a través del ORAL, el Concello de A Estrada ingresa ahora 586.000 euros al año -146.611 por trimestre- por la recogida de la basura generada y depositada en el casco urbano, a lo que se suman los 197.988 euros recaudados por este servicio en el ámbito rural. De este modo, por el cobro de esta tasa las arcas locales ingresan 784.000 euros, cuantía sensiblemente superior -56.000 euros más- a los 670.000 que se ingresaban en 2011, antes de la citada inspección tributaria.
Aun asumiendo la dificultad que comporta la prestación de este servicio municipal de forma directa, el jefe del ejecutivo estradense reconoció ayer que el Concello lo afronta con un ahorro importante con respecto a ofertas llegadas de algunas empresas que podrían asumir la gestión. Indicó José López que estas propuestas "estaban cerca del millón de euros".
El Concello de A Estrada cerró en los últimos días la contratación de diversas mejoras en la recogida de basura, tanto en el casco urbano como en el rural. Contando con una ayuda de la Diputación, inyectará al servicio este año 726.000 euros. La mejora comporta la incorporación a las rutas de recogida de dos nuevos vehículos y una renovación del parque de contenedores. En el casco urbano los colectores pasan de 330 a 155, al incrementarse la capacidad de cada unidad y para las parroquias se compran otros 400 como los actuales. El rural cuenta a día de hoy con un parque de 800.
