El Concello de Lalín instaló tiempo atrás una zona de seguridad entre el edificio de la biblioteca municipal y el carril de circulación por el que se accede a la urbanización de O Regueiriño. Está compuesto por unas piezas metálicas unidas por una cadena, que junto a la señalización horizontal pintada en la vía, advierten a los conductores de la necesidad de extremar la precaución.
Uno de esos postes fue destrozado, posiblemente debido al impacto de un vehículo, y debe ser reparado. Este episodio recuerda el de las últimas semanas con las bolas de piedra de la calle Matemático Rodríguez, que parecen ser el objetivo de conductores despistados o que no son capaces de ver los elementos de seguridad.