El alcalde de A Estrada, José López Campos, ve inviable priorizar en el momento actual la recuperación por parte del Concello del conjunto patrimonial conformado por A Torre y el pazo de Guimarei y su puesta en valor, como pretende el BNG. "El tiempo de las obras faraónicas se ha acabado", opinó el máximo mandatario local en alusión a las críticas vertidas por los nacionalistas en un comunicado en el que criticaban que el alcalde considerase "un problema" un conjunto arqueológico que realmente debería considerar "una oportunidad". Para el munícipe, no solo se acabó el tiempo de las obras faraónicas sino también "crear infraestructuras" simplemente para verlas o para poner en valor aspectos históricos". Esto, a juicio del primer edil de A Estrada es algo que "está muy bien" pero que, ahora, en el actual contexto -tras la crisis económica que ha sacudido la sociedad y la economía general- no es viable desde un punto de vista económico.

En su opinión, precisamente para poner en valor esos aspectos históricos es para lo que "tenemos el Museo do Pobo Estradense Manuel Reimóndez Portela". Y precisamente hasta en cómo funciona este ve el munícipe un argumento que avala su prudencia en esa materia. "Con las condiciones actuales" -de restricciones hasta a la hora de contratar personal para el ayuntamiento, apuntó- "no somos capaces ni de abrirlo".

Idealismo

A su juicio, el comunicado del BNG responde al "idealismo" de sus integrantes. Entiende que el Bloque, en aras de ese idealismo, "a veces llega a imaginarse cosas. "No discuto", ironizó, que en el momento en el que los ediles nacionalistas alcanzaron el gobierno en A Estrada -en el marco del ejecutivo bipartito liderado por el socialista José Antonio Dono y la nacionalista Raquel López Doce- tratándose de "una época" mucho más propicia económicamente " pudiera ser. Pero hoy, con las condiciones actuales, el alcalde no ve visos de que cualquier iniciativa de ese tipo pudiera llegar a buen puerto.

"Todo lo que no sea eficiente es difícilmente ejecutable", consideró, añadiendo justo a continuación que "tenemos proyectos de suficiente entidad" como "para centrarnos en ellos y no abrir nuevos frentes".

Entre estos frentes están proyectos como la ampliación de los jardines municipales, que el ejecutivo proyecta ejecutar este mismo año por fases para evitar el cierre del parque en el período estival.

"A Torre está ahí", subrayó el máximo mandatario local. "Nunca tuvimos un enfrentamiento con los propietarios", incidió, de modo que entiende que la relación entre el Concello y los propietarios es buena. Ahora bien, el regidor local de A Estrada duda mucho de que "para un gobierno" local en las actuales circunstancias -"ni para este ni para otro", remarcó- A Torre de Guimarei "sea objetivo prioritario".

Para "fuentes" y "lavaderos"

Y a ese respecto, lamenta que -teniendo esa sensibilidad y considerando tan importante su recuperación- "ellos" (en alusión a los nacionalistas) que "gobernaron en A Estrada" con el gobierno bipartito y tuvieron "8 millones de euros" no apostasen por ese proyecto. "Fue una pena que en aquel momento de vacas gordas no planteasen ningún proyecto al respecto", reiteró. Por el contrario, insistió, dedicaron esa ingente cantidad de fondos a "fuentes, lavaderos" y "el resto no sabemos muy bien a qué".

De ese modo, enfatizó el máximo mandatario local, "perdieron una oportunidad histórica" para actuar sobre el pazo y A Torre de Guimarei. "Gobernar es tomar decisiones", hizo notar. "Ellos tuvieron la oportunidad" y la dejaron escapar por lo que no ve creíble su postura actual de exigirle al actual gobierno lo que no hicieron cuando ellos mismos eran gobierno.