El sindicato CIG organizó ayer una concentración ante las puertas del colegio Sagrado Corazón para protestar contra el despido de la docente Ánxeles Rodríguez Amado, que desde 2015 impartía la especialidad de Audición e Linguaxe. En torno a 20 simpatizantes de la organización corearon consignas como "Non á represión no Sagrado Corazón" o "Estiveron ó lorito para darme o finiquito". Hubo, también, menciones al conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, ya que este departamento es quien abona los salarios de los docentes, al tener el pago delegado.

El responsable del área de Ensino en Pontevedra del sindicato, Xosé Nogueira, indicó que la asesoría jurídica de la organización está elaborando la demanda que se presentará ante los juzgados por fraude tanto en los contratos como en el finiquito. En vista de que el centro no quiere readmitir a la docente, se continuarán con movilizaciones y con una campaña de firmas que ya supera las 400 signaturas en favor de la readmisión de la docente, para la que el centro ya ha encontrado sustituta, según indica el sindicato.

Ánxeles Rodríguez quiso insistir en que el director, Manuel Gil, y el jefe de estudios, salvador Meijide, le obligaron a firmar el finiquito sin leerlo, y que se le dijo que prescindían de ella porque tenía preferencia un familiar de un socio. Añade que "vinieron a buscarme ellos, yo no entré por la puerta de atrás" para impartir Audición e Linguaxe.