Agentes de la Consellería de Medio Ambiente, técnicos de Conservación de Carreteras y miembros del GES Lalín participaron en la mañana de ayer, en la parroquia lalinense de Botos, en las labores de rescate de un joven corzo malherido. Conservación de Carreteras fue quien dio la alarma al Concello de Lalín sobre la presencia a primera hora del venado en una tajea de la cuneta de la carretera PO-534. Inmediatamente, desde el consistorio lalinense se trasladó el aviso de emergencia a Medio Ambiente y a la oficina de GES Lalín, que poco después se personaron en el lugar donde apareció el animal con varios efectivos y un vehículo.
Las labores de rescate del corzo, que según testigos presenciales podría tener un año de edad, se llevaron a cabo en una zona muy castigada por el frío y las heladas. El ciervo presentaba heridas en la pata derecha trasera y en su lomo, por lo que tuvo que ser extraído de la zanja en la que apareció mediante unas cuerdas para evitar que sufriera durante su traslado al remolque que GES Lalín proporcionó para el rescate. El animal fue cubierto con una chaqueta reflectante de las usadas por los operarios de Conservación de Carreteras. Una vez estabilizado el animal, el coche y el remolque que transportaba al corzo herido emprendieron viaje hasta el Centro de Recuperación de Fauna Silvestre que la Xunta tiene en Cotorredondo (Marín). El año pasado en Cotorredondo se atendieron a 860 animales, un 88% de aves, el 7,7% de mamíferos y un 4,5% de reptiles. Si se encuentra a un animal salvaje herido o enfermo hay que comunicarlo directamente al centro marinense, al Concello, a través de la delegación provincial de la Consellería de Medio Ambiente, del Servicio de Protección a la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) o avisando a emergencias en el 112. Poseer un animal salvaje supone una infracción grave.
