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La Xunta cierra el traslado de la sede de la OAC de Lalín para un bajo de la calle Ponte

Facenda hizo pública ayer la resolución del concurso -Al proceso se habían presentado cinco ofertas de particulares, pero dos fueron excluidas por incumplir los requisitos mínimos

Vista del bajo comercial de la calle Ponte al que se trasladará la sede de la OAC. // Bernabé/Luismy

A la tercera fue la vencida. Después de dos concursos públicos fallidos en los últimos años al quedar desiertos, la Xunta cerró ayer la adjudicación de las nuevas dependencias de la Oficina Agraria Comarcal (OAC) de Lalín, que trasladará su sede a un bajo del número 56 de la rúa Ponte.

La Consellería de Facenda hizo público a media mañana un concurso que había iniciado hace casi ya seis meses. La apertura de las ofertas estaba prevista para, según el pliego, el 17 de julio, pero hasta ahora no había trascendido el acuerdo. Pese a que se trata de unas instalaciones de Medio Rural, como en las anteriores ocasiones, fue Facenda la que gestionó el procedimiento. La oferta más valorada fue la presentada por Domingo Aller, que obtuvo un total de 77,56 puntos. En consecuencia, ahora solo resta que el inmueble sea acondicionado y se pueda concretar el traslado del personal de este servicio, que llevaba años de reivindicaciones y protestas exigiendo unas instalaciones no solo dignas, sino que cumpliesen la normativa de accesibilidad. La OAC llevaba más de cuatro décadas en un vetusto primer piso sin ascensor de la calle Areal. Para esta misma rúa un licitador presentó una oferta con un inmueble del número 64, pero tuvo menos puntuación, como también la de Edelmiro Fernández y María Carou, que presentaron a la oferta un local en la calle B. La alternativa más valorada, según indica la resolución de la consellería, precisa obras por un importe de 20.000 euros. Las otras fueron valoradas en 60.000 y 12.000 respectivamente. Otras dos ofertas quedaron fuera por no cumplir los requisitos mínimos establecidos en el concurso público.

El pliego establecía que los licitadores debían proponer un local de una superficie mínima de 350 m2 útiles en planta baja o en baja y alta comunicadas por ascensor. El contrato tiene una duración de diez años desde la firma del contrato y una vez transcurridos los cinco primeros la Xunta podrá desistir en el alquiler sin ningún tipo de indemnización siempre que lo comunique con una antelación mínima de 30 días. El tipo de licitación establece que el particular recibirá una renta máxima de 1.200 euros mensuales más IVA. La administración autonómica habilitó para este concurso una partida máxima de 204.480 euros. Los gastos que origine la publicación de los anuncios del concurso serán por cuenta del adjudicatario, hasta un máximo de 1.200 euros.

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