Los trabajos de ejecución de la primera fase de mejora integral de la carretera PO-234, que comunica los municipios de Cerdedo-Cotobade y Ponte Caldelas, del presente mes de noviembre. Así lo confirmaron hoy fuentes del Concello de Cerdedo-Cotobade después de que su presidente, Jorge Cubela, coordinase a responsables de la Xunta de Galicia y de la empresa que resultó adjudicataria de los trabajos en la visita de organización de las obras proyectadas para la zona.

Cubela acudió a la cita acompañado por el presidente de la Comunidade de Montes de Augasantas, Nicasio Rivas, precisamente porque este conoce a la perfección el entorno afectado por las actuaciones previstas. De hecho, según fuentes municipales, sus aportaciones “fueron de gran ayuda” para el replanteo de los trabajos, en el que también se dieron cita técnicos de la Axencia Galega de Infraestruturas y representantes de la empresa Francisco Gómez y Cía.

El replanteo de las obras es el último trámite administrativo previo al inicio de los trabajos. Sirvió para perfilar un buen número de aspectos organizativos de la obra, realizar mediciones y efectuar una completa visita a toda la zona afectada bajo la pretensión de comprobar qué servicios resultarán afectados. De ahí la importancia de la participación del presidente de los comuneros de Augasantas en el replanteo de toda la actuación.

Según se indicó desde la administración local de Cerdedo-Cotobade, en el transcurso de la visita el presidente Jorge Cubela y los técnicos de la Axencia Galega de Infraestruturas realizaron un amplio recorrido fijándose en numerosos detalles y concretando otros muchos. Así, prestaron especial atención a los servicios, suministros y prestaciones que resultarán afectados por la mejora así como a los muros que será preciso rehacer para poder acometer las obras. Las mismas fuentes destacaron que el presidente municipal “se interesó especialmente por las acciones de reposición previstas en aras de la defensa de los intereses de los vecinos y propietarios”.

En cuanto a esta primera fase de obras, tal y como detalló la conselleira de Infraestruturas Ethel Vázquez el pasado 15 de mayo al visitar la parroquia de Aguasantas, afectará a un trecho de 2,69 kilómetros que discurren íntegramente por tierras cotobadesas. A este respecto, desde la administración local se hace notar que “el gobierno de Jorge Cubela fue capaz de alcanzar la cesión de los terrenos mientras que Ponte Caldelas aun está en un proceso expropiatorio”. El tramo afectado por las obras comprende desde el punto kilométrico 4,150 -radicado en el cruce de Portasouto- hasta el 6,840, ya en Aguasantas. Las obras serán ejecutadas por la empresa Francisco Gómez y Cía, a quien le fueron adjudicadas por un importe de 523.000 euros.