Gustavo V.C., el vecino de Agolada investigado como presunto responsable de 16 incendios en varios puntos del municipio, continuará en prisión provisional comunicada y sin fianza, a la espera de que continúe la instrucción del caso. Así lo sentencia la sección segunda de la Audiencia Provincial, que ratifica los dos autos del Juzgado Número 1 de Lalín del 4 y del 26 de septiembre, contra los que apeló el detenido, proponiendo que en lugar de ir a prisión, o bien fuese puesto en libertad sin fianza o con una fianza mínima, o bien ingresase en un centro psiquiátrico.
La Audiencia no solo decide que continúe en prisión, sino que incluso deja caer que por los hechos que se le vinculan, se deduce "la posibilidad de imponer unas penas bien superiores a los dos años de prisión". Se basa en lo que denomina "sólidos indicios de responsabilidad criminal del recurrente en lo relativo a la comisión de los incendios forestales" acaecidos sobre todo durante la segunda quincena de agosto tanto en montes como en masas forestales del municipio. En el vehículo del detenido, un Renault Megane, se colocó un dispositivo de localización por GPS que permitió situar a Gustavo V.C. "en el lugar, itinerario y hora de los incendios", recalca la sentencia, añadiendo que resulta muy significativo "que allí donde paraba el coche se situaba el foco de cada incendio". A estas localizaciones se suman declaraciones de testigos, las grabaciones de las cámaras de videovigilancia tanto de una estación de serviciocomo de un club y, por último, los seguimientos de la Guardia Civil. Ante todas estas evidencias, la Audiencia asegura que no puede decir que no existan indicios aunque el detenido no reconozca los hechos que se le imputan.
La sala provincial rechaza dejar en libertad al presunto pirómano, aunque éste alegue que tiene arraigo en Agolada y que carece de recursos económicos suficientes como para huir de la justicia. Tampoco admite el argumento de que su ingreso en prisión pueda empeorar el supuesto tratamiento de rehabilitación que estaba siguiendo para controlar su esquizofrenia y su adicción al alcohol.
Condenas anteriores
Pero es que además, la decisión de que Gustavo V.C. continúe en prisión a la espera de juicio obedece a que no es la primera vez que ingresa en la cárcel: en 2012 se le condenaba a dos años de privación de libertad por plantar 150 fuegos en diversos puntos de A Coruña, Pontevedra y Lugo. Se le obligó, además, a indemnizar con 36.000 euros a la Xunta, a Telefónica y los propietarios de los terrenos quemados por el gasto y las pérdidas que originaron estos fuegos. En 2013 se le sustituyó la pena por un tratamiento psiquiátrico externo para controlar sus impulsos de piromanía, así como por una terapia psicológica. Pero "la evolución posterior del propio apelante muestra la ineficacia de la medida entonces aceptada", reza la sentencia. De hecho, en 2015 la Guardia Civil volvió a considerarle responsable de otros 29 incendios. La Audiencia no tiene en cuenta los informes médicos que aporta el recurrente. a ser anteriores a la sentencia de finales de septiembre, pero está abierta a que se someta a nuevos exámenes médicos.
