"Tienen que hablar los agentes implicados directamente", opina el alcalde de Lalín en relación con la problemática de los incendios, al tiempo que aboga por una "reordenación" de los montes, una mayor "limpieza" y, sobre todo, por incrementar la "política de prevención". Rafael Cuiña reiteró ayer lo que ya había dicho días antes desde Argentina: Que "la Xunta metió la pata hasta el fondo al despedir a los brigadistas en época de sequía". Insiste en su petición de responsabilidades políticas, que no dimisiones, y no entiende por qué se molesta tanto el portavoz local del PP.

"El PP de Lalín está a la que salta por cualquier cosa", declaraba ayer el alcalde en una emisora local. "Que repase la hemeroteca", dice el regidor en relación con las "durísimas críticas" vertidas por el PP contra el bipartito autonómico durante la ola de incendios que azotó Galicia en el verano de 2006. "Decían que con ellos no moría gente", recuerda Cuiña, cuando se habían producido cuatro muertes a causa del fuego en los montes, como sucedió el pasado fin de semana. El PP liderado por Alberto Núñez Feijóo pedía entonces la dimisión de Alfredo Suárez Canal, "un excelente conselleiro", apostilla.

"Tuvimos suerte de que empezó a llover", sentencia, antes de tildar a los autores de los fuegos de "terroristas incendiarios, pero los de ahora y los de antes". También reprocha la "poca urbanidad" de los vecinos que no limpiar sus fincas. Por último, Rafael Cuiña no es partidario de contratar brigadas municipales de apoyo a los bomberos forestales, "porque luego no se coordinan bien entre ellos". Los propios miembros de las brigadas de la Xunta se oponen a estos equipos por su baja profesionalidad y experiencia.