La junta de gobierno local nombró ayer a la concejala Amalia Goldar instructora de dos expedientes de responsabilidad patrimonial formulados por sendos particulares. Uno de ellos reclamó por daños materiales en un vehículo a raíz de una colisión por alcance contra un coche de la Policía Local. En este caso, le fue reconocida la responsabilidad y la indemnización no llega a los 300 euros.

Pendiente de resolverse está, sin embargo, la reclamación formulada por una persona que cayó en la vía pública, concretamente en la Avenida de Pontevedra, a la altura del paso de peatones del Bar Estación. Según denuncia, el vial no estaba en condiciones puesto que, según apunta, en el lugar existe un desnivel en una alcantarilla sin señalizar, lo que motivó su caída. Solicita una indemnización de 3.566 euros. La administración local procederá a iniciar los trámites para determinar si existe o no responsabilidad patrimonial.