Silleda es el único municipio de Deza que no está teniendo ningún tipo de problema. El alcalde trasdezano, Manuel Cuiña, indica que las captaciones de la traída municipal son "muy buenas" y afirma que "no me constan que alguna de ellas esté en peligro". Asimismo, explica que solo necesitan, como mucho, realizar un bombeo semanal de los ríos Deza, para Silleda, y Toxa, para A Bandeira, cuando las captaciones de agua ubicadas en Siador y Moalde, respectivamente, no llegan a alcanzar.

En Rodeiro "la situación es delicada", reconoce el primer edil, Luis López. No se han llevado a cabo restricciones, pero teme que si esto sigue así no hará falta restricciones porque simplemente "no habrá agua". En algunos lugares del rural la traída ya ha secado, las casas se ayudan con el bombeo de los pozos particulares.El que tampoco piensan por ahora en restricciones es Dozón, sí en un uso moderado. Desde el Concello explican que sí que han notado que la escasez de precipitaciones ha dejado los manantiales con muy poco caudal, pero confían en que llueve la próxima semana. Por ahora no han puesto en marcha la colocación de bandos informativos, pero no descartan hacerlo si ven que la situación se agudiza.