'Carabelo' será el nuevo equipo de voluntarios que pertenecen a la Asociación O Mencer que realizará trabajos de integración. Esta formación empezó con la única ayuda de los alimentos de O Mencer, con el paso del tiempo, fueron varios negocios los que fueron realizando aportaciones. Sus principales fuentes de ingresos son el calendario que realizan a final de año y la subvención del Concello.

La asociación está formada por Valentina Díaz, presidenta; María José Ferreiro (vicepresidenta), Jesús Gil (secretario) y Rebeca Iglesias como tesorera. Entre los vocales se encuentran los presidentes de O Mencer Rocío Díaz y Antonio Riera. Los miembros de Carabel quieren resaltar que no son dos asociaciones diferentes, "somos hermanas, trabajamos conjuntamente. La nueva entidad no existiría si no fuese por O Mencer", aclara Díaz. Desde la asociación solicitan que haya más voluntarios para poder acoger a más familias. "No queremos que dediquen todas las tardes, con una hora es suficiente. Organizaremos charlas en los institutos para fomentar el voluntariado juvenil", comenta Díaz.

El nombre de la asociación es 'Carabelo', que son los cestos que servían para llevar comida para los trabajos. "El nombre es un símbolo que representa la asociación. Nuestro objetivo es la integración. Muchos de los niños están en riesgo de exclusión social", explica Iglesias. El año pasado tuvieron casi 60 de diferentes nacionalidades. En el curso que viene quieren trabajar también con las madres, por ejemplo con las musulmanas están tratando de hacer una labor de integración. La asociación empezó centrándose en los pequeños, pero "con el paso del tiempo te vas dando cuenta de que también hay que contar con los padres y las madres", aclara Díaz.

Desde la asociación ofrecen merienda a los pequeños, adaptada a la religión de cada uno, además de ofrecer la ayuda en cuanto a nivel de estudios y, lo principal, la integración en la sociedad. También les realizan revisiones médicas. Tienen previsto crear una biblioteca en la nueva aula cedida por el Concello. "Muchos no disponen de un escritorio en su casa, así lo tienen aquí", comenta Iglesias.

Una de las últimas adquisiciones fue un ordenador y tienen previsto instalar internet. También tienen previsto instalar un teléfono en el local situado en frente al Xesús Golmar, donde se pueden realizar las inscripciones que estarán abiertas en la primera semana de septiembre, durante dos semanas aproximadamente. La intención de los voluntarios es empezar con el curso escolar durante todas las tardes en las aulas de las que disponen. A medio plazo solicitarán ayuda de una persona que esté de forma permanente en el establecimiento para facilitar los trabajos administrativos.