El Partido Popular de Lalín acusa al gobierno local de ser el responsable único de que los vecinos del rural tengan que hacer frente en este año a los recibos correspondientes del proceso de regularización catastral, "cuando los podían ahorrar hasta el año 2018 como ocurrirá en Rodeiro o en 2019, como podría ocurrir en A Estrada, donde ni está decretada la regularización".

Los concejales de grupo municipal popular dicen que no va a permitir que el alcalde, Rafael Cuiña, "manipule" diciendo que se adelantó el proceso porque no quedaba otro remedio. Insisten en que si en este concello se aprobó el procedimiento para su cobro este año fue por deseo del cuatripartito, reiterando que otros municipios como Rodeiro y A Estrada buscaron soluciones para retrasarlo "y que entrase en vigor lo más tarde posible". Expone que Cuiña si aceleró el proceso con las decisiones de la junta de gobierno de noviembre de 2015 es porque lo consideraba necesario para ampliar los presupuestos y no porque no tuviese otra salida. Insiste en que en la junta de gobierno del 16 de noviembre de 2015 se acordó que el término municipal fuese incluido "en la próxima resolución que se apruebe", hecho que motivó que la Dirección General de Catastro actuase y en consecuencia los trabajos de campo ya se desarrollasen el año pasado. El PP vuelve a poner como ejemplos a A Estrada y Rodeiro y en este último caso indica que la administración local de Camba planteó al organismo estatal que el plan de regularización catastral se dilatase hasta la última resolución que se aprobase durante 2016. "El Concello de Rodeiro consiguió que, mientras que en Lalín están llegando ya los recibos actualizados y nuevos, todavía ahora esté rematado el trabajo de campo y los rodeirenses no tendrán que pagar la regularización hasta mediados de 2018".

A juicio de los populares lo que decidieron los gobiernos estradense y rodeirense, retrasando al máximo la regularización que impone Madrid, motivó que los pagos se demorasen el máximo tiempo posible. Por el contrario, remarcan, en Lalín su gobierno estaba más preocupado de recaudar impuestos y ampliar las arcas municipales lo antes posible. El PP admite que si bien esta medida es obligatoria, existían medidas para demorar lo máximo posible su puesta en marcha y por tanto que los recibos fuesen pasados al cobro más tarde, "cosa que no quiso el gobierno de Lalín".

Los representantes del PP califican como "vergonzoso" que el mandatario trate de desviar la atención de la llegada de las notificaciones y de los nuevos recibos, que si llegan ahora es por su responsabilidad, además de apostillar que son tiempos complicados para el agro. Por último recuerdan que habían criticado en su momento la decisión del gobierno municipal de acelerar el proceso y ahora lamentan que el regidor trate de esconderse de sus responsabilidades y eche la culpa al Partido Popular con este asunto.