Los municipios de Rodeiro y Dozón planean elaborar ordenanzas con las que regular la bonificación del recibo del IBI a los propietarios de inmuebles afectados por la regulación catastral, conocida también como 'catastrazo' y que afecta a naves, galpones, invernaderos y demás construcciones vinculadas a explotaciones agroganaderas. Ambos municipios aún no han concretado qué porcentaje del recibo se les devolverá a los vecinos.

La medida es similar a la que ya tienen en vigor Silleda y Lalín. En ambos casos y previa solicitud, los afectados recobrarán el 95% de lo que paguen por esta regularización. Días atrás, la Dirección General de Catastro anunció que ampliaba el plazo de rastreo de bienes sin regularizar en 125 municipios gallegos. En las comarcas, Lalín Silleda y Dozón, en donde en principio el rastreo tenía que haber terminado en julio, tendrán de plazo ahora hasta el 30 de octubre. Por su parte, en A Estrada, Forcarei y Rodeiro, además de en Cotobade (fusionado con Cerdedo desde el año pasado se amplía hasta el 1 de julio del año que viene (en principio expiraba el 30 de noviembre). Catastro alega que opta por ampliar el rastreo debido a la dispersión geográfica de muchos núcleos y al elevado número de ayuntamientos. En Cerdedo, Vila de Cruces y Agolada ya se están cobrando los recibos.