Únicamente 5 de las 345 empresas que figuran en el Ardán 2017 -todas de Lalín- arrojan un valor añadido negativo, lo que supone un notable descenso con respecto a las 19 que había tres años antes. La compañía con peores números en este aspecto es Antonio Framiñán SL, de Lalín, con -281.883 euros, una facturación de 844.841 y 2 empleados, según datos de 2015. Con -231.253 euros está Aljorfema SL, cuya cifra de negocio rebasa los 2 millones de euros. Habinorte Urban SL, que facturó 209.361 euros, arroja un valor añadido de -120.328; Nélida Castro Granja SL, con negocio cifrado en 330.410 euros y trece trabajadores, cerró con un valor de -71.429 euros; y Lideralia Home Inversiones Inmobiliarias, con 223.893 euros facturados y una nómina, se queda en 51.244 euros, aunque es la única de las cinco con rentabilidad positiva (5,15%).