Mientras las noticias sobre las circunstancias de la muerte del empresario forcaricense Antonio Arca Brey llegan a sus allegados a cuentagotas y entre cierta confusión, la familia y las administraciones públicas, tanto locales como autonómicas, estatales e internacionales, tratan de agilizar la repatriación de la víctima, fallecida el pasado martes en la ciudad mexicana de Culiacán. En su casa natal del lugar de Rozados, perteneciente a la parroquia de Quintillán, y aún sin poder asimilar la trágica noticia, la hermana del fallecido, Lidia Arca, admitía a primera hora de la tarde de ayer desconocer con exactitud el transcurrir de los hechos que acabaron con la vida de su único hermano. "No sabemos. Hay varias versiones, pero yo la oficial no la tengo", apuntó.

Sí pudo hablar, aunque con mala cobertura, con la novia de su hermano, que se encuentra en México. Aunque "se escuchaba muy mal y ella también estaba muy nerviosa", le entendió que Antonio Arca el día de los hechos "se marchó solo para casa, que la vecina escuchó unos golpes, que salió a la ventana y que había dos personas pegándole. Cuando salió el marido escucharon como un disparo. Entonces, cuando se marcharon, la vecina salió a ayudarlo, porque parece ser que él, en ese momento, estaba todavía con vida. Llamaron a la ambulancia y ella le pidió que le dejase su móvil para avisar a su novia, y él le dijo: mi móvil se le lo han llevado ellos", relató ayer Lidia Arca.

Los hechos ocurrieron pasadas las diez de la noche del martes, hora española -en torno a las tres de la tarde, hora mexicana-. Lo sabe porque a esa hora Lidia se escribió con su hermano por Whatsapp, manteniendo una conversación cotidiana que no hacía pensar que fuese a sufrir una situación de peligro. Otras versiones apuntan a que Antonio Arca podría haber sido "víctima de un atraco cuando iba en su coche", dato que ni la familia ni fuentes oficiales pudieron confirmar ayer.

El cónsul español de Monterrey contactó con la familia para trasladarle sus condolencias e informarle de que está abierta una investigación sobre el crimen para aclarar las circunstancias. "Nos confirmó el fallecimiento, que nos transmitía su pesar y que estaban intentando realizar los trámites para su repatriación; nos habilitaron un teléfono" para poder contactar, señaló la hermana del empresario. También la alcaldesa de Forcarei, Belén Cachafeiro, y su teniente de alcalde, Ricardo Villaverde se desplazaron a la casa natal del fallecido para dar el péseme a sus padres, hermana y demás familiares y "para ofrecerles la ayuda que necesiten. Estamos a su entera disposición", explicó la regidora. A continuación, la hermana se desplazó al consistorio para gestionar el papeleo necesario para enviar a México. La regidora contactó con la Secretaría Xeral de Emigración de la Xunta de Galicia y con la subdelegada del Gobierno que, a su vez, habló con el Ministerio de Asuntos Exteriores y con el embajador para ayudar a la familia con los trámites. "Dicen que puede tardar hasta quince días, pero lo que se está intentando es que llegue cuanto antes", explicó la mandataria local.