La mayor parte de los concellos s de Deza y Tabeirós cerraron sus cuentas del año pasado con un balance positivo y un superávit que, solo en los casos de Lalín y A Estrada, suma más de 1,9 millones de euros. Más problemas para cuadrar sus balances económicos tuvieron Vila de Cruces y Agolada, que gastaron más dinero del que ingresaron. El concello cruceño muestra un desequilibrio de 434.831 euros, mientras que Agolada gastó 483.457 euros más de los que llegaron a sus arcas municipales. Estos dos municipios destacan entre los primeros de la provincia con un mayor grado de diferencia negativa en sus cuentas públicas. Vila de Cruces cerró su presupuesto con 4,5 millones de gastos y el de Agolada fue de 2,8; con el mencionado desequilibrio entre recursos obtenidos y gastos.

A Estrada es, tanto en términos absolutos como porcentuales, el que presenta un superávit más elevado al alcanzar 1.088.718 euros. El de Lalín fue de 828.723, Silleda (163.146), Rodeiro (348.518) y en Forcarei fue de 185.850 euros. El ministerio no dispone de datos de Dozón y tampoco de Cerdedo-Cotobade. La Mancomunidade Terras de Deza muestra un superávit de 2.512 euros.