El informe de participación ciudadana incluye una encuesta sobre la percepción de los servicios y actuaciones municipales. "Es bueno saber cómo están las cosas para guiarnos a la hora de tomar decisiones", dice Casares, que niega que sea propaganda del gobierno, pues sirve a vecinos y oposición para criticar lo que falla. En todo caso, "es una foto fija, tiene un valor limitado", apostilla.
La valoración general es bastante positiva, pues solo hay dos servicios públicos que suspenden: El estado de las zonas verdes, con un 4,1, y la sanidad (4,8%), mientras que la oferta cultural salva el aprobado (5,1). Por el contrario, la ciudadanía otorga la mayor puntuación al abastecimiento de agua (7,6) y a la presencia de instalaciones deportivas (7,2), seguidos de saneamiento del agua (6,9) y, curiosamente, presencia de zonas verdes y libres (6,5).
La mayor parte de la población desconoce el estado de la red de saneamiento y de la oferta cultural -en este caso, a veces por falta de interés-; en cambio, sí tiene una idea clara del estado de los servicios sanitarios y de la existencia de parques y zonas verdes. Los vecinos del rural son menos críticos que los urbano, excepto en el saneamiento del agua y el estado de los senderos -incluidas pistas-. En las parroquias son muy críticos con el estado del saneamiento, del que carece la mayoría, si bien un porcentaje significativo no ve esto como un problema. La población urbana es más crítica respecto a instalaciones, oferta cultural y alumbrado público.
La percepción varía entre la población vinculada, que trabaja o estudia en Lalín, pero no reside. Valora muy positivamente las zonas verdes (7,9), cuyo estado aprueba (5,7), y las instalaciones deportivas (7,6); solo suspende los senderos (4,6).