El departamento municipal de Turismo de Silleda pone en marcha un plan de señalización e interpretación del patrimonio histórico y natural, gracias a una partida de 7.942 euros que concede la Diputación para realizar actuaciones de este tipo. Silleda presentó un proyecto en el que se incluyen varios lugares que son "enclaves dispersos por nuestra geografía, que merecen una mención especial", en palabras de la concejala, Ana Luisa González Costa.

Así, se colocarán paneles informativos en Ponte Taboada, sobre el río Deza; el conjunto histórico de O Foxo; el lugar de Penadauga (en Escuadro), vinculada a la romería de Santa Isabel que arranca este fin de semana; el Castro de Toiriz, muy próximo al casco urbano de Silleda; el Parque das Pedrosas, también cerca del casco; el lavadero y fuente comunitarios de Fonte do Campo; y el Muiño de Covián, en Rellas, construido en 1810 y que pasa por ser el más grande de la comarca ya que en su momento dispuso de cinco muelas.

Con esta iniciativa, se quiere difundir el enorme patrimonio natural e histórico que tiene Silleda, al margen de sus dos reclamos más conocidos: la Fervenza do Toxa y el monasterio románico de Carboeiro. En este sentido, en los últimos meses se acometió la señalización de estos dos puntos desde diversas zonas del municipio, para facilitar la llegada de vecinos así como de turistas de otros municipios. Complementa, además, otras propuestas que se materializaron el año pasado, como la señalización de la Ruta do Románico.

Así pues, durante estos días se colocan los carteles informativos en los enclaves mencionados. Estos paneles tienen una estructura similar y recogen distintas características así como los datos históricos de cada lugar. Así, la propuesta del gobierno trasdezano toma como referencia el antiguo Camiño Real a Santiago, arrancando así en la Pons Tabulata, construida en el año 912 en Taboada. Destaca, también, el lugar de O Foxo, uno de los conjuntos históricos más antiguos del actual Concello y de la antigua jurisdicción de Trasdeza. O Foxo fue antaño un cruce de caminos medievales así como un paso obligado de los arrieros de la ribera ourensana que se trasladaban a Compostela para vender su vino. O Foxo vivió su época de esplendor entre los siglos XVI y XIX, llegando a tener diversos servicios para comerciantes y peregrinos, como una casa de postas, herrero, botica, correos y hasta estanco. Su relevancia fue tan grande que hasta llegó a albergar la casa consistorial, hoy prácticamente cubierta por las hiedras.

La labor de señalización que está acometiendo el gobierno socialista afecta también a los dos cascos urbanos. Tanto en la rúa Trasdeza, junto al actual consistorio, como en la praza Juan Salgueiro, en A Bandeira (cerca del callejón de la iglesia), se colocarán sendos paneles dobles, con callejeros actualizados de las dos villas y dos mapas turísticos del municipio. Estos paneles se colocarán en los próximos días. González Costa apunta que "creemos que esta información será muy útil tanto para los visitantes y turistas como para los miles de peregrinos que pasan por Silleda cada año en dirección a Compostela".