Cuatro vecinos de Pontevea y Barcala acaban de constituir la Asociación Recreativa-Cultural Entre as Pontes, con el objetivo de poner en valor las playas fluviales de Pontevea-Couso y San Miguel de Barcala así como de unirlas con una ruta de senderismo que aproveche el ingente potencial turístico que atesoran sus seis kilómetros de cauce fluvial del Ulla, comprendido entre el puente medieval de Pontevea y el puente moderno que comunica Barcala y Sinde.

El presidente del nuevo ente -fundado formalmente el jueves y que ya está en trámites para registrarse ante la administración- es Pedro Castañeda Sánchez, el ideólogo de la recuperación de la playa próxima al puente medieval de Pontevea que se acometió en los últimos meses tras dos décadas de abandono. Si entonces su iniciativa fue secundada rápidamente por el joven Manuel Brey de Couso y el propietario del centro comercial Pernas de Pontevea así como por otros vecinos de la zona (planteándose la fundación de la Asociación Ponte Abea, que finalmente no se formalizó), la celebración de jornadas de voluntariado en la playa de Pontevea primero y en la de Barcala después -con vecinos de Barcala como Javier Miguéns Magariños, muy vinculado al cuidado de la de su parroquia desde hace tiempo- hicieron emerger la idea de constituir un único colectivo para trabajar en conjunto por todo el ámbito. Decidieron entonces buscar un nombre conjunto y optaron por Entre as Pontes por ser ese su radio de acción.

A fin de equilibrar el peso de ambas zonas dentro del colectivo, Javier Miguéns asumió el jueves la secretaría de Entre As Pontes, en tanto que la vecina de Pontevea María del Mar Fernández Faro fue designada tesorera y Marisa Magariños Matalobos, vocal encargada de la zona de Barcala.

Más allá de la playa fluvial de Pontevea -antaño muy frecuentada- Entre as Pontes pretende recuperar la deteriorada playa de Copacabana y fomentarla para mascotas, aguas abajo de la de Pontevea. También plantea aprovechar el camino de 750 metros de longitud que se abrió hasta el Muiño do Cachón, este y las islas que hay en este trecho del Ulla creando un conjunto de pasarelas. Serían solo algunos de los atractivos de la ruta que pretenden impulsar, contando con la colaboración de otras asociaciones y de los concellos de A Estrada y Teo. La ruta también pasaría aguas abajo por el Xirimbao, permitiendo cruzar su puente colgante, antes de continuar aguas abajo hasta la playa de Barcala, que lleva años recibiendo visitantes como los que ayer disfrutaban de su bucólica estampa. Saltos de agua, zonas de rápidos, pesqueras de lamprea. la musicalidad del agua y un verde espectacular conforman parajes extraordinarios que "solo hay que poner en valor para que los pueda disfrutar todo el mundo", subrayan Castañeda y Miguéns.