El 1 de enero de 2012 entraba en vigor la Ley sobre Titularidad Compartida de las Explotaciones Agrarias, que permitía a las mujeres que trabajan en el campo figurar como propietarias de sus explotaciones, lo que se traduce en poder cotizar a la Seguridad Social, acceder de forma permanente a actividades de formación o derecho a una compensación económica en caso de que transmisión de la explotación o ruptura de la pareja.

La norma supuso la llegada a la meta de un largo camino que comenzó en la década de los 80 para visibilizar el trabajo femenino en el rural, que muchas veces sobre el papel quedaba reducido a la calificación de "ama de casa". Sin embargo, cinco años después, esta ley apenas ha tenido repercusión en Deza y Tabeirós-Montes: según los datos que maneja la Consellería de Medio Rural, en la zona no hay ninguna explotación que se haya pasado a titularidad compartida. Es más, a nivel gallego se contabilizan sólo 17, en base a los datos que maneja el Ministerio de Agricultura. A pesar de que Galicia no llega a la veintena de granjas en las que las mujeres son cotitulares, es una buena cifra, superada solo por Castilla y León (con 120), Castilla-La Mancha (97) y La Rioja (20). Las 290 explotaciones que hay en toda España con titularidad compartida se completan con las 8 de Valencia, las 6 que operan tanto en Asturias como en Aragón, 5 de Cataluña, 4 en Extremadura, 3 tanto en Navarra como en Cantabria y una en Murcia.

La escasa impronta de esta norma puede deberse a que aumentan las granjas en las que son solo titulares las mujeres (con 31.001 casos, es decir, el 46,9% del total).

Haz click para ampliar el gráfico

El dato no deja de ser curioso en una zona con una profunda actividad ganadera. Los nueve municipios cuentan con 10.393 explotaciones, poco menos de la décima parte de las 109.061 que se registran en toda la comunidad. E, igual que ocurre a escala gallega, en Deza y Tabeirós se impone con holgura el ganado vacuno, con 4.209 explotaciones localizadas sobre todo en Lalín (con 1.023), A Estrada (851) y Silleda (557). Es el ganado porcino la segunda actividad con más pulso en las comarcas, con 2.517 explotaciones dadas de alta y en las que destacan, por este orden, las de Lalín (640), Rodeiro (326) y Silleda (270).

A nivel mediático, las ganaderías de ovino y caprino tienen menos presencia en la zona, pero los pequeños rebaños han proliferado como complemento a la renta de las ganaderías de vacuno. Suman, en total, 1.988 explotaciones y destacan de forma notable en A Estrada, con 680. Las ganaderías ecuestres también deben tenerse en cuenta, al alcanzar las 1.302 en los nueve municipios. A partir de aquí, las explotaciones ganaderas son mucho más modestas en cuanto a cifras: Deza y Tabeirós cuentan con 168 explotaciones de aves, seguidas por las 136 dedicadas a la producción de miel y cera con abejas y las 20 de conejos (sin ejemplos en Cerdedo-Cotobade y Forcarei). A modo de anécdota, se localizan tan solo dos empresas de acuicultura: una en A Estrada y la otra en Cotobade, fusionado con Cerdedo y que además aporta la única explotación ganadera de caracoles que está dada de alta en toda la zona del norte pontevedrés.