Sin fortuna pero con mucho trabajo por parte de cazadores, perros y agentes medioambientales se cerró ayer la segunda jornada de batida autorizada por la Consellería de Medio Ambiente al Tecor A Rocha para atajar los cuantiosos daños que los jabalís maizales y prados de ganaderos de Curantes, Olives, Rubín, Lamas y Pardemarín. No hubo tregua durante todo el día ni casi tiempo para comer. Los cazadores tomaron un bocadillo antes del inicio y a las 17.30 horas aun no habían comido.