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Otra forma de sacarle jugo a la manzana

Un joven estradense elabora un snack a base de esta fruta deshidratada, que él mismo cosecha

Javier Agrelo en su finca de San Tomé de Ancorados, ayer, mostrando los snacks de manzana deshidratada recién hechos. // Bernabé/Cris M.V.

Decir manzana en A Estrada es decir sidra. La gran mayoría de los cultivadores de esta fruta en la localidad destinan su recogida a la elaboración de esta bebida, bien mediante producción propia, bien a través de la venta a cooperativas para su posterior transformación. Pero Javier Agrelo López, un joven de San Tomé de Ancorados de apenas 30 años, ha decidido sacarle jugo a la manzana -también en sentido literal-, buscándole un "valor añadido" a su cosecha y lanzando al mercado un snack de manzana deshidratada. Lo presentará el próximo sábado, día 3, aprovechando la celebración de la VI Feira da Sidra estradense y bajo su propia marca, Biofruit Galicia, creada para este proyecto.

El tentempié lo elabora él mismo, utilizando materia prima casera y ecológica y utensilios semi-profesionales. Las manzanas, de las variedades Regona y Pero de Chantada, las cosecha en su finca de 1,4 hectáreas de extensión. Una vez recogidas, seleccionadas y debidamente lavadas, el proceso de deshidratación comienza extrayéndole el corazón de la manzana, de modo que deja la pieza sin pepitas y sin rabo. A continuación, las corta en rodajas -unas con piel y otras sin piel, dependiendo del tipo de snack que quiera realizar-. El siguiente paso consiste en meter esos trozos de manzana en el horno a una temperatura constante de unos 65 grados centígrados, mediante sistema de ventilación. Este proceso de secado en un horno semi-profesional debe durar entre seis y siete horas, el tiempo suficiente para absorberle el agua a todos los trozos. "Aquí la manzana pierde un 80% o más de su peso", explica Agrelo. Cada kilo de ellas frescas se reduce a "aproximadamente 80 o 90 gramos de fruta deshidratada", calcula.

Una vez sacada del horno y esperada alrededor de media hora -el tiempo prudencial para que se enfríe-, los trozos pueden ya envasarse. Agrelo lo hace en tarrinas de 250 mililitros, que contienen alrededor de 40 gramos de fruta. "Cuanto más deshidratada, más concentración de sabor se logra", apunta el joven, quien asegura desconocer la existencia de un producto de estas características en la zona. "Esto vale como aperitivo o como tentempié de tarde. Es una explosión de sabor distinta y una forma de comer fruta natural y, sobre todo, saludable, porque aporta una cantidad ingente de nutrientes al cuerpo con una pequeña porción", comenta sobre las características culinarias y nutritivas de su producto.

La Feira da Sidra del próximo sábado será el primer escaparate para sus snacks de manzana deshidratada, pero lo cierto es que ya ha apalabrado con tiendas de Santiago y Pontevedra la colocación de sus tarrinas en sus líneas de venta. Además, su recién estrenado producto estará a disposición del consumidor en Internet, a través de un a plataforma especializada en este tipo de alimentos saludables cuya creación también se ultima. En la feria despachará la tarrina a 2 euros y ofrecerá también un pack de tres por 5 euros. Ahora bien, todo aquel que quiera probar los snacks podrá hacerlo a partir del mediodía y hasta agotar existencias, en la degustación gratuita que ofrecerá y para la que prevé disponer de entre 1,5 y 2 kilos de manzana deshidratada.

Para Agrelo la producción de manzana supone un complemento a su actividad profesional como técnico forestal y de recursos paisajísticos en una central de biomasa. No es tampoco el único fruto que cultiva. Su primera plantación fue de kiwi, en 2010. Un año más tarde incorporó la manzana -ahora con una producción actual de entre 3.000 y 4.000 kilos- y, posteriormente, el arándano -con una plantación de unos 1.000 pies actualmente, con previsión de ampliar-. Hace dos años sembró también caqui y frambuesa, cultivos estos dos últimos que mantiene en sendos campos de ensayo. Su principal mercado son las cooperativas, pero con esta nueva línea de productos pretende dar otra salida a una parte de su producción. "Es a pequeña escala, bajo pedido, con una línea ecológica, sin adictivos ni conservantes; solo fruta natural", proceso de deshidratación que en otoño prevé comenzar con el kiwi, fruto cuya última cosecha rondó los 1.000 kilos.

"Voy a ver si gusta, si el producto va calando y hay posibilidades de ir aumentando la producción, siempre en función de los pedidos", señala en referencia a los snacks de manzana deshidratada, proceso éste que "es factible con toda la fruta que produzco", asegura.

Golosinas, la otra novedad

Las golosinas elaboradas a base de "fruta cien por cien" es otro de los productos que este emprendedor estradense prevé lanzar al mercado próximamente, con las frutas que él mismo cosecha como ingrediente principal. Se trata de un proceso de elaboración en el que aún trabaja y su intención es poder mostrar también algún avance en la feria del sábado.

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