El espíritu satírico de Don Carnal afloró ayer en los actos del Entroido tradicional que habían sido aplazados por el mal tiempo previsto para el martes de Carnaval y que cosecharon una gran afluencia de público. Como había ocurrido con el desfile con concurso de disfraces del sábado, la jornada carnavalesca de ayer en A Estrada también fue un éxito. La actualidad internacional copó el grueso de las coplas del "atranque" de los Xenerais da Ulla que protagonizaron vecinos de las parroquias estradenses de Cora y de Santa Cristina de Vea. El nuevo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ocupó un lugar destacado en el enfrentamiento dialéctico de los "xenerais", que repasaron sus proyectos más controvertidos -el "muro" en la frontera con México y su intención de deportar a los inmigrantes sin papeles- así como las acusaciones de "racista" vertidas por sus detractores. Los "xenerais" estradenses se debaten entre pensar que "ese hombre va a cumplir su palabra" y considerar que "está como una cabra". No obstante, concluyeron que lo mejor será "dejarle tiempo" ya que "está por ver" lo que hará. Todavía "acaba de llegar".

Su análisis de la situación internacional también se centró en la presión que la inmigración ejerce sobre las fronteras de Europa. "Desde que abrieron las fronteras esto es un coladero" apuntaba uno de los "xenerais", rebatido por otro que señalaba que "la normativa vigente busca el interés global" antes de que le replicasen que "ahora se llenó el país de ladrones y maleantes". También hubo críticas para los "ladrones y estafadores" del sector bancario mientras que su replicante defendía que "los que no actuaron limpio fueron todos sancionados y ahora los que quedan están muy actualizados". Estas coplas y las que aludieron a la sentencia de las cláusulas suelo que favorece a los usuarios, también criticaron que los "notarios "en el momento de firmar" las hipotecas con cláusulas abusivas mirasen "para otro lado". Se adentraban así las huestes del Entroido tradicional estradense en la actualidad nacional, considerando "una auténtica vergüenza" que se celebrasen "tres elecciones en un año" y que la juventud siga viéndose abocada a la emigración al estar en paro 4 millones de personas mientras que "los que están trabajando hay que ver las condiciones". Le rebatía su contrario asegurando que la "situación está cambiando", que el trabajo ya es "mucho menos precario", que "ya pasó la etapa dura" y que los problemas "se arreglarán en la presente legislatura por lo que "en dos años" quienes ahora se van al extranjero "también tendrán oportunidades".

Aunque los "xenerais" no hicieron sátira local, la hubo. La parroquia de Guimarei concurrió con un grupo que parodiaba al alcalde -con un joven alto que le estrechaba la mano continuamente al público por la calle- y un irreverente grupo de operarios bajo el nombre de "Os novos empregados do Concello". Las demás parroquias no hicieron sátira local. Tras la charanga Straden´s Band Os Xirimbaos, que pusieron la nota musical a la celebración, llegaban a caballo los "xenerais" con sus vistosos trajes, lanzando los tradicionales "vivas" a los asistentes. El "troncomóvil" de Los Picapiedra de Cora les seguía la pista, precediendo al "Parque Natural de Arnois" con una variada fauna: mariposas, vacas, osos y hasta un lobo. Luego, desfilaban los Pitufos, vikingos y princesas de Disney detrás del castillo de "Érase unha vez Riobó". Príncipes, el Pato Donald, Minnie y Mickey Mouse, Astérix, Obélix, otro "troncomóvil" con los Picapiedra, personajes de Toy Story, Los Tres Cerditos, Caperucita, personajes de Alicia en el País de las Maravillas, Popeye y dos versiones de Cruella de Vil con sus dálmatas (uno de ellos real). Tras ellos llegaban los cabezudos de la Escola de Artes Escénicas de A Estrada, bajo la atenta mirada de su responsable, Xosé Lueiro; el poblado y los personajes de la "Moreira India", con el "tam tam" de los tambores o la olla sobre la que pendía una calavera; los "Egipcios" de la Asociación de Veciños A Saleta de Loimil (con coreografías); la "Aldea Gala" de San Xurxo de Vea con Astérix, Obélix, coreografías y hasta la pócima mágica; los falsos operarios del Concello llegados de Guimarei y los animales que bailaban en torno al único grupo vinculado a un establecimiento hostelero local, el del Eureka Park, inspirado en la selva.