El Delegado de Obra del Obispado de Lugo, Miguel Gómez Vázquez, y el arquitecto de la diócesis, Jesús Bouzas Fernández, recibieron ayer de manos del también arquitecto de los servicios técnicos de Patrimonio, Federico Garrido, la obra de recuperación de la techumbre de la iglesia de San Lourenzo, así como la colocación de tres nuevas puertas de castaño para acceder al templo. El sencillo acto administrativo tuvo lugar en medio de un ambiente cordial y contó con la presencia de varios feligreses de Vilatuxe, que también ayudaron a ornamentar el altar mayor de la iglesia con varios candelabros y un incensario comprados por el párroco Eliseo García Sanmartín. Los trabajos forman parte de una actuación integral tendente a la recuperación del esplendor artístico de la iglesia, que comenzaron hace meses con la restauración del retablo del altar mayor por parte de la especialista María Alejos.
El castaño preside el flamante nuevo artesonado que se sostiene por medio de vigas laminadas. "Lo que es la cubierta en sí creo que está presupuestada en 87.500 euros, de los que 80.000 van a cargo de Patrimonio, y nosotros tuvimos que poner el resto mediante la aportación voluntaria de los vecinos", explicó el orgulloso párroco de Vilatuxe mientras esperaba la llegada del técnico de la Xunta. De todas formas, los trabajos de restauración de la iglesia de Vilatuxe esperan de ciertos flecos para darlos por concluidos. Se trata de la colocación de un acceso lateral para personas discapacitadas, la eliminación de una losa contigua al retablo principal y la construcción de un servicio en la sacristía. "Tenemos permiso de Patrimonio para acometer los últimos trabajos y esperamos ayuda tanto de la diócesis como del Ayuntamiento, y creo que dentro de un par de meses todo puede estar listo".
Tiempo récord
La construcción del nuevo artesonado de la iglesia de San Lourenzo se llevó a cabo en un tiempo récord por la empresa afincada en Ourense Construcciones Mascareñas e Hijos, S.A., que "fue una empresa que estaba en el País Vasco, pero después con esto del impuesto revolucionario se tuvieron que marchar para terminar en Ourense", recordó el párroco de Vilatuxe. Lo cierto es que los trabajos se iniciaron en noviembre de 2016 y ayer se daban por rematados por parte de las autoridades. El sacerdote destacó "los enormes andamiajes que utilizaron para trabajar y colocaron una carpa por encima de la iglesia durante los cuatro meses de actuación. Destaca una linterna situada justo encima del altar mayor que cuenta con una celosía para mitigar la entrada de la luz, lo que acrecienta el carácter místico de esa zona del recinto.
"Llevamos gastados 31.000 euros más; en el retablo destinados 4.683 euros, las puertas fueron 6.126 euros, en la cubierta 7.500 euros, en la electrificación unos 8.000 euros porque la instalación va toda empotrada, y yo calculo que vamos a ir sobre 150.000 euros, por lo menos", calculó a vuelapluma Eliseo García durante el recorrido efectuado por la remozada iglesia. Los vecinos de Vilatuxe aportaron unos 25.000 euros para los trabajos de restauración porque "hubo gente muy sensible y porque tenían ganas de poder contar con una iglesia digna" apostilló este sacerdote. El cura ejerció de anfitrión de las distintas autoridades que acudieron al templo, entre los que se encontraba el concejal del Rural de Lalín, Miguel Medela, vecino de esta parroquia.
Eliseo García Sanmartín es un auténtico defensor de la recuperación del patrimonio artístico eclesiástico de la Diócesis de Lugo. El propio sacerdote recuerda supervisar trabajos similares en San Miguel de Vilela, después de más de 40 años de triste abandono, o el templo románico de San Xulián de Campo, que también tiene cubierta nueva, y la iglesia románica de Santa María de Castelo, o la iglesia conventual de Santa María de Piñeira. Sin olvidar el excelente trabajo llevado a cabo en la iglesia de Arcos da Condesa.
