Alumnos de la ESO del IES Laxeiro de Lalín participaron ayer en la charla ofrecida por Isabel Ruiz en torno a las mujeres olvidadas de la historia. Hoy estará en este centro escolar Xosé Manuel Pereiro para hablar de la libertad en los medios de comunicación y la falta de visibilidad de las mujeres en ellos. La ilustradora andaluza participó después en el club de lectura feminista de la biblioteca municipal.
-¿En qué consiste su proyecto Mujeres de libros ilustrados?
-Me invitaron al Laxeiro para contarle a los chicos cómo nació esta colección donde aparecen algunas de las figuras femeninas más interesantes en distintos ámbitos. No me gustaban los modelos femeninos que nos presenta la televisión y, como tengo un hijo y una hija, quería poner a su alcance ejemplos más interesantes y abrirles así el abanico de posibilidades.
-¿Son muchas las mujeres olvidadas por la historia oficial?
-Yo creo que son demasiadas. La verdad es que cuando te pones a mirar lo que es un libro de texto pues te das cuenta de que aparecen más ejemplos masculinos que femeninos, como si el tiempo fuera borrando poco a poco la huella de todas las mujeres en la historia.
-Si embargo, aunque pocas, si es cierto que las que aparecen en los libros de historia parece que llegaron a mandar mucho, ¿no?
-Yo creo que no hubo pocas, si no que es que no nos han llegado sus relatos porque empiezas a investigar y a indagar y averiguas que hay una representación importante de mujeres en todos los ámbitos, a pesar de que les impidieran a muchas de ellas alcanzar puestos relevantes. Como te decía, el problema es que no nos llega esa información. Seleccioné dieciocho mujeres para el primer volumen de Mujeres, todas ellas de campos muy diferentes, como científicas, deportistas o pintoras, entre otras. Mi intención era tocar todos los sectores posibles para que la gente pudiera encontrar un punto de conexión entre ellas.
-¿Por qué piensa que no nos ha llegado esa información?
-La verdad es que no soy capaz de entender el por qué, es algo que no me entra en la cabeza. Evidentemente, seguro que tiene mucho que ver con el tipo de sociedad que hemos tenido. En el primer libro de mi proyecto aparecen algunas mujeres muy conocidas, como Virginia Wolf, Hipatia, Frida Khalo o Clara Campoamor, figuras que a todos nosotros nos suenan, y procuré unirlas a mujeres desconocidas. Son mujeres que consiguieron alzar su voz, enfrentarse a la sociedad y demostrar su valía en un tiempo donde era muy complicado, y por eso sus ejemplos no se estudian ahora en los colegios.
-¿Le gusta autodefinirse como una artista feminista-?
-No entiendo como se puede asociar el feminismo como algo negativo cuando es simplemente una lucha por la igualdad. Al final, parece que hablar de feminismo es hablar de algo radical cuando en realidad debería ser algo natural. Yo creo que todo el mundo debería definirse como feminista. Creo que hay respetar la diversidad, y acciones como las del famoso autobús atentan contra la libertad del individuo y son muy negativas.
-¿Tiene previsto continuar con nuevas entregas de Mujeres?
-El proyecto no está cerrado porque estoy trabajando ya en el tercer volumen, que espero que esté listo para Navidad. Todavía queda mucho por rescatar por ahí. Estoy encantada porque la gente se volcó desde el minuto cero con el proyecto y hubo que reimprimir. Del primer volumen llevamos ya cuatro ediciones y el segundo llevará unos 2.000 ejemplares vendidos hasta ahora.
