El jefe territorial de la Consellería de Medio Rural en Pontevedra, Antonio Crespo, y el alcalde de Vila de Cruces, Jesús Otero, acudieron ayer a la entrega de la notificación de la toma de posesión de las nuevas fincas de la concentración parcelaria de Insua-Duxame-Portodemouros. Al acto, que tuvo lugar en el auditorio Xosé Casal, estaban convocados los 566 propietarios afectados.

Esta concentración se inició en el año 2000, para reorganizar 10.809 parcelas, que han quedado reducidas a la décima parte, 1.275. Con la entrega de las fincas de reemplazo, los propietarios ya pueden entrar en sus nuevas parcelas. En concreto, podrán tomar posesión real a partir del próximo miércoles, 1 de marzo, de los terrenos de prado, pastizales, labradío sin cosecha y monte, mientras que habrán de esperar a que se retiren las cosechas actuales en los terrenos restantes. Además, se establece el 1 de septiembre como fecha límite para retirar el arbolado. En el caso de especies autóctonas protegidas, hay que disponer del permiso previo del Servio de Montes y un informe favorable del Servizo de Conservación da Natureza. Por otra parte, se abre un plazo de 60 días naturales, a contar desde el citado 1 de marzo para reclamar en caso de que haya diferencias superiores al 2% entre la cabida real de las fincas y la que consta en el expediente de concentración.

La conselleira que encabeza Ángeles Vázquez invirtió hasta la fecha 1,2 millones de euros en esta concentración parcelaria. Tiene pendiente la mejora del acceso a la iglesia parroquial de Insua, pospuesta en varias ocasiones por falta de presupuesto. Esta obra, que permitirá disponer de más espacio de aparcamiento, contempla el derribo de una casa deshabitada. Para ello, se estudia permutar la parcela sobre la que se asienta por otra propiedad en las masas comunes de la parcelaria.