Gonzalo Otero Alonso hubiera cumplido ayer 82 años. La tierra que le vio nacer lo acoge en su seno y nos deja huérfanos, pero no solos. Nos queda su recuerdo, su ejemplo y su memoria que seguirán vivos en cada uno de los que lo hemos conocido y de los que hemos compartido su afecto, sus enseñanzas y aprendido de su ejemplo. Dejó Galicia muy joven pero nunca olvidó su tierra, a la que siempre regresaba para para estar con los suyos. Su peripecia vital le llevó a Madrid y su pasión a la enseñanza, de la que ya no se separó jamás. Primero como profesor y luego como fundador de lo que con el tiempo se ha convertido en la Institución Educativa Los Sauces.

En unos tiempos en los que asistir a clase sólo significaba estudiar, memorizar y examinarse? Gonzalo Otero fue pionero en poner en práctica una idea educativa integral, dando importancia a los valores personales de cada uno de los alumnos, buscando aquello que los hacía diferentes y únicos, y apostando por todas las materias: música, deporte, arte, idiomas. Y donde las notas no era lo único importante. Porque con su ideología educativa, en la que los niños son los protagonistas, consiguió que miles de estudiantes crecieran como personas íntegras y felices.

Aquel sueño es hoy realidad. Los Sauces ha crecido con cuatro colegios en España y uno más en Irlanda. Pero en este proyecto no estuvo sólo, supo rodearse de las personas adecuadas para sacarlo adelante, supo contagiarles su entusiasmo y su fortaleza, y por eso hoy la Institución Educativa Los Sauces es reconocida como uno de los grandes centros educativos del país. Sólo esperamos que Gonzalo -desde ahí arriba- siga guiándonos y ayudándonos a continuar con su obra.

*En representación de la Institución Educativa Los Sauces