El grupo de gobierno de Lalín sopesa presentar una reclamación a la constructora de la nueva casa consistorial tras detectar problemas en el sistema de climatización del edificio. El departamento de Novas Tecnoloxías, que dirige Tomás Vilariño, explica que tras realizar unas primeras reparaciones en estos mecanismos se pudo comprobar que apareció corrosión en las tuberías que entiende se generó por no disponer estas canalizaciones de un separador galvánico en la distribución de las mismas.

Las carencias en el sistema de calefacción afectan a unas zonas del Castro Tecnolóxico y surgieron hace unos días. A partir de ahí los servicios de mantenimiento municipales comenzaron a inspeccionar la avería y la semana pasada detectaron ya una serie de fugas en algunas de las máquinas del sistema de climatización encargadas de impulsar el aire caliente por los circuitos del inmueble. Una vez localizadas estas fugas, el personal procedió a darles solución mediante la reparación de las piezas dañadas y con la purga de todo el circuito, unos trabajos que se llevaron a cabo durante el pasado viernes incluso en horario nocturno con el objetivo de atajar esta deficiencia lo antes posible. No obstante, expone el gobierno local, a raíz de llevar a cabo estas actuaciones se detectaron bolsas de aire en el sistema que seguían impidiendo el normal funcionamiento de la calefacción. Asimismo, mientras se reparaban estas averías aparecieron nuevos problemas en el sistema que estaban ocultos y afectaban a las canalizaciones de 3 de las 11 máquinas calefactoras de las que dispone la casa consistorial, de modo que los mecanismos afectados quedaron de nuevo fuera de servicio. Este revés provoca básicamente que en el círculo oeste del Castro Tecnolóxico no funcione la calefacción, aunque el resto del edificio no se vería afectado.

Tomás Vilariño afirma que esta avería no tiene "consecuencias destacables" pues se emplearon termómetros para medir la temperatura en el edificio público y en todas las zonas del mismo hay más de 20 grados de temperatura, cuando el máximo aconsejado por el Ministerio de Industria son 21. De todos modos, para tratar de paliar esta situación en las partes afectadas del edificio, fueron distribuidos calefactores portátiles. Dar solución a las averías que persisten y atribuidas al deterioro de las tuberías es, expone el gobierno local, una tarea compleja que requiere vaciar todo el circuito de agua del edificio para poder trabajar y solucionarlo mediante soldaduras o la reposición de piezas. Estos trabajos está previsto que comiencen el próximo viernes 27 y se desarrollarán durante todo el fin de semana, con el objetivo de que el lunes 30 la calefacción comience a funcionar de nuevo. Las zonas afectadas son, en la planta baja, el Registro municipal y dependencias anexas como las de los partidos políticos. Y en la segunda planta, las que están justo encima de las anteriores. La casa consistorial de Lalín comenzó a ser construida por la UTE formada por Proinsa y FCC, aunque ésta última fue la que retomó las obras, en 2008, tras la quiebra de la primera.