Mayo de 2005. A Estrada inauguró su nueva Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR), emplazada en Aguións. Antes del acto protocolario de puesta en funcionamiento de las nuevas instalaciones, el Concello colocó señales para orientar a quienes quisiesen acercarse a conocer esta nueva infraestructura en materia de saneamiento, una dotación que supuso una inversión de 3,1 millones de euros. Sin embargo, aunque en este 2017 le toca soplar todavía las velas de su 12 cumpleaños, la EDAR comienza a dar signos de haberse quedado pequeña.

Los restos orgánicos -para unos vertidos fecales, para otros lodos tratados- que aparecieron estos días en la parroquia de Barbude y que se asumieron como procedentes del alivio de la depuradora tras un pico de incremento del caudal de agua que debía tratar han abierto la puerta a la necesidad de plantearse redimensionar esta estación. Desde el gobierno estradense se incide en que las instalaciones funcionan correctamente, si bien no deja de reconocerse que "están al límite" en cuanto a su capacidad.

Y es que en 2005 se diseñó una infraestructura de saneamiento pensada para asumir el tratamiento de las aguas residuales de hasta 10.000 habitantes. En estos momentos, a la red de saneamiento de la villa habría conectadas alrededor de 5.500 viviendas. Aunque solo se estimase que en cada uno de estos hogares viven dos personas, los usuarios potenciales ya excederían la capacidad con la que se estrenó esta planta.

Las instalaciones funcionan con un sistema biológico, pudiendo tratar -en base a los datos aportados en el momento de su inauguración- hasta 360 metros cúbicos de agua al día. El proyecto, inaugurado en aquel mes de mayo de 2005 por el entonces conselleiro de Medio Ambiente, Xosé Manuel Barreiro Fernández, -en presencia del entonces conselleiro de Xustiza, Jesús Palmou, del alcalde Ramón Campos y con el actual regidor local, José López, entre la comitiva de autoridades locales-, incluyó la creación de tres estaciones de bombeo de aguas residuales situadas en Lagartóns, Gumarei y Figueiroa, con 3.377 metros lineales de tuberías de impulsiones, así como la instalaciones de 2.083 metros lineales de colectores generales. Se colocaron también 2.353 metros lineales de emisarios.