El Concello de Rodeiro derribará las ocho casas de maestros que son de su propiedad para construir un local destinado a usos de la tercera edad y un nuevo Punto de Atención Infantil (PAI). La actuación también contempla la mejora del acceso al pabellón municipal. El gobierno de Luis López se decanta por la demolición de las viviendas, porque su rehabilitación encarecería la actuación "un 30%", según las conclusiones de un estudio encargado hace unos meses.

El alcalde anuncia que la inversión "histórica" de 150.000 euros empezará a hacerse realidad en el primer trimestre de 2017, pues confía en que el proyecto esté listo en enero. La primera fase contempla el derribo de las ocho casas que habían sido desafectadas a favor del Concello de Rodeiro en 2008 -las más próximas al colegio-, así como el tratamiento de los escombros generados, la apertura del acceso nuevo al pabellón, que ocupará el espacio de una o dos casas, y el acondicionamiento del solar para acometer, más adelante, la construcción de los dos nuevos espacios destinados a mayores y niños. Estos primeros trabajos absorberán, según López, la aportación de 150.000 euros del Plan Concellos de la Diputación, que califica como "la mayor inversión conjunta de la historia de Rodeiro".

Su gobierno tenía previsto activar durante este año este proyecto, concebido inicialmente como una rehabilitación de las casas para su uso como viviendas sociales. Sin embargo, un estudio realizado meses atrás ha desaconsejado el arreglo de los inmuebles, ya que "sería más costoso que tirarlos y levantar otros nuevos", afirma el regidor. "Ante esta conclusión decidimos cambiar la orientación y destinar el espacio a un edificio polivalente para usos de la tercera edad", añade. Permitirá la prestación de un servicio público inexistente hasta la fecha en la localidad, por lo que su construcción será "prioritaria".

La otra parte del proyecto, aún sin definir, conllevaría el traslado del PAI a una zona en donde gozaría de más espacio y de un patio exterior para los juegos infantiles. En todo caso, esta actuación es secundaria respecto al local de la tercera edad, porque el servicio se está prestando ya en el bajo de un inmueble anexo al consistorio, que, en un futuro, sería recuperado para usos municipales.

"Sin lugar a dudas, es uno de los proyectos sobre los que girará el Rodeiro del futuro", sentencia López. En cualquier caso, tanto el local para mayores como el nuevo PAI dependerán de la financiación que se vaya obteniendo. Para la primera existe "predisposición" de la Consellería de Política Social, pero no hay nada acordado, indica el alcalde, que planteó la propuesta a su titular antes de las elecciones gallegas.