Hoy termina el plazo de justificación de las inversiones que han hecho los titulares de explotaciones agrarias y ganaderas en medidas de prevención de daños que puedan causar el lobo, el oso o el jabalí. Entre estas medidas se incluye la adquisición de perros mastines, pastores eléctricos o cercas de malla electrificada. En los últimos días la Consellería de Medio Ambiente está remitiendo a los solicitantes de estas ayudas las resoluciones, y en algunas de ellas figuran subvenciones de tan sólo 20 euros para pastores eléctricos cuyo precio roza los 400, es decir, la ayuda cubre únicamente el 5% de los gastos.
Desde Unións Agrarias se critican estas míseras aportaciones, y se recalca que en el sector primario "no estamos para perder el tiempo", indica el secretario comarcal, Román Santalla. "Es uno de los problemas más grandes que tenemos en Galicia y hay que solucionarlo, porque las pérdidas son astronómicas", añade. En la comarca de Deza en los últimos meses son frecuentes los ataques de lobos y cánidos a las ganaderías, mientras que el jabalí hizo estragos en fincas de maíz y, una vez que se recogió éste, es muy frecuente su incursión en praderas. Por poner algunos ejemplos de los ataques de fauna salvaje, una explotación de Barregallos (Carboentes, Rodeiro) ha sufrido cuatro incursiones del lobo en sus fincas en el último medio año. Como resultado, ha perdido tres vacas, un burro y una novilla. "Lo que no puede hacer Medio Ambiente es engañar a la gente" con una línea de subvenciones que no aportan nada y que no hace sino sumir al sector aún más en la crisis que atraviesa desde hace años.
Censo
Por otra parte, Santalla también recuerda al departamento que encabeza Beatriz Mato que active de una vez por todas el estudio de la población de jabalí y lobo "y que en base a ese informe se elabore un planteamiento sobre las necesidades de controlar la fauna salvaje" para que su impacto en los cultivos y las cabañas ganaderas sea mínimo. Pero desde el sindicato ganadero se propone, además, que se realice un estudio sanitario sobre la población de jabalíes abatidos, "ya que no se está haciendo nada, y debería controlarse si en esta especie hay casos de tuberculosis", indica el sindicalista. Su iniciativa viene avalada por datos del Ministerio de Agricultura (Magrama), según los que en torno al 20% de los animales están infectados. De hecho, en Extremadura está activada la alerta desde hace meses por esta situación.
