La Asociación de Empresarios de Deza (AED) congregó ayer a 170 comensales en la tercera edición de su xuntanza, dedicada a Rodeiro, aunque celebrada en el Pazo de Bendoiro por cuestiones económicas y de logística. Fue un encuentro especial por celebrarse tras un año "intenso y quizás demasiado tenso" por la primera contienda electoral de su historia, de la que salió victorioso Antonio Lamas, frente a un Gerardo López, ausente ayer, aunque si estuvieron presentes miembros de su candidatura. El presidente se congratuló de que no se produjese "la división irreparable" que él había llegado a temer e invitó a los presentes a aumentar el censo de 350 socios -30 más en el último año- para acercarse al medio millar de otro tiempo.

Lamas felicitó a su directiva y a los trabajadores de la AED -con mención y detalle especial para Teresa Romero, que deja la entidad tras muchos años para dedicarse al negocio familiar- por mantener los servicios de antes de la crisis, a pesar del recorte de subvenciones públicas. Pero advirtió de que "cuesta llegar a fin de mes" y de que a menudo suplen la falta de recursos "con petición de favores personales, que no es una solución sostenible". Por eso, anunció una futura subida de cuotas para los asociados, al tiempo que quiso tranquilizarlos, puesto que no tiene por qué ser negativa para sus bolsillos si aprovechan los muchos servicios que les brinda la asociación, sobre todo convenios. "Rentabilizad vuestra pertenencia a la AED y haced de prescriptores ante empresarios que no son socios", exhortó Lamas. En la misma línea, animó a las empresas a publicitarse en la revista que próximamente sacará el colectivo con ayuda de la Diputación.

A continuación, tomó la palabra Jorge Cebreiros, presidente de la Conferederación de Empresarios de Pontevedra (CEP), que avaló "el trabajo" y la petición de "unidad" de Lamas y reivindicó a sus colegas como "verdaderos tractores de la economía y el empleo". El diputado Carlos López Font intervino en nombre de la presidenta provincial, Carmela Silva, ausente este año por la celebración de su aniversario. Valoró el "entusiasmo" y "claridez de objetivos" de la asociación, a la que mostró colaboración.

El conselleiro de Cultura, Educación e Ordenación Universitaria, Román Rodríguez, definió a los empresarios dezanos como "un referente a seguir", personas "valientes, positivas, basadas en la cultura del esfuerzo". A su juicio, son también un referente para los alumnos, que cuentan con herramientas adecuadas para comenzar a forjar una actitud emprendedora desde los propios centros educativos. Incentivar el espíritu emprendedor es "objetivo prioritario" de su departamento.

Alegato por el gallego

La estradense Marga Pazos, presentadora de TVG, volvió a ejercer de maestra de ceremonias durante las intervenciones y la entrega de los ocho premios de este año (dos más que en 2015). El primero en subir al estrado fue Manuel Núñez, gerente de Técnicas & Gramaxe, que recibió la distinción de manos de Valentín García, secretario xeral de Política Lingüística. Premiado por su fomento del gallego, el editor silledense lanzó un bello alegato en defensa del idioma. David Campos, vicepresidente de la AED, entregó el galardón al emprendimiento a Susana Aguiar, cofundadora de Kalekói, que valoró más el aprendizaje de apenas un año de empresarios que los diez anteriores de formación. Jorge Pereira recibió el premio a la internacionalización por su proyecto Aerocámaras de manos de Mari Carmen Fernández, directora de zona de Abanca. Como empresa innovadora fue galardonada Megodeza, cuyo propietario, Ramiro Mejuto, tras ser agasajado por Jorge Cebreiros, se mostró "implacable ante el desánimo y la desesperanza" y se acordó con emoción de su mentor, Ramiro López.

Los dos premios nuevos fueron: En hostelería, para Jaime Rodríguez Trigás, del Bar Kubo's, que lo recogió de manos de Carlos López Font; y en comercio, para Meritxell Silva García, con entrega de Antonio Lamas.

Para el final quedaron los dos galardones de Rodeiro: El otorgado por el concello, por manos de su alcalde, a la cooperativa cunícola Cogal, cuyo presidente, Natalio García, proclamó que "hay esperanza para el sector primario" y aseguró que "el secreto no es tal", sino "trabajo, apretar filas y tirar para adelante, invertir, innovar y errar las menos veces posibles y acertar las más". José Moure recogió el galardón especial por su trayectoria al frente de Muebles Moure de manos de Román Rodríguez.