En lo que va de año, la Diputación destinó a Silleda en torno a 1.150.000 euros, es decir, 130 euros por habitante, según desveló ayer la presidenta, Carmela Silva, en el transcurso de su visita al municipio. Silva insistió en que con la nueva Diputación, Trasdeza dejó de estar marginada, ya que con el anterior gobierno provincial del PP "nosotros hacíamos una única obra, mientras que los concellos del contorno realizaban varias", indicó el alcalde, Manuel Cuiña.

Sus declaraciones tuvieron lugar al pie de la rúa Lourás, en A Bandeira, cuyo acondicionamiento corre a cargo, precisamente, del Plan Concellos, mediante una inyección económica de 66.573 euros. La obra consiste en la urbanización, mejora del alumbrado, canalización de pluviales y dotación de un sendero peatonal. Se antojaba una intervención necesaria más que nada porque desemboca en los vestuarios de un campo de fútbol que también va a acondicionarse para estar "en plena disposición para ser usado en breve", apuntó Cuiña, mientras recordaba que este arreglo del estadio fue otra de las promesas en vano del gobierno de Rafael Louzán, el anterior presidente, "que hace ocho años vino a Silleda y dijo a los vecinos que si ganaba el PP el campo estaría hecho en tres meses".

No será el único campo de fútbol que se remodele en Silleda. En el encuentro posterior que mantuvieron Silva y Cuiña con miembros de la SD Silleda y la directiva de la Escola Municipal de Fútbol, el alcalde desveló que el año que viene, también dentro del Plan Concellos -que aumentará su cuantía para con Trasdeza respecto al presente ejercicio- se acometerá el cambio de césped del campo de fútbol de Outeiriño, presupuestado en 200.000 euros.

Esos más de 1,1 millones de euros que recibió Silleda en el presente año se reparten entre los 630.000 del citado Plan Concellos; 50.000 para equipamientos deportivos; 90.000 para la contratación de 12 personas en el concello; en torno a 43.000 dentro del apartado de cultura y lengua; 83.000 para cohesión social y juventud; 68.000 para contratar a becarios que trabajan en el municipio y en cinco empresas privadas del ayuntamiento; 13.000 para igualdad; 153.000 para Medio Ambiente (de los que 150.000 se destinaron a la Semana Verde); 8.900 a cubrir los gastos de la persona encargada de atender al público en el monasterio de Carboeiro y, por último, 84.000 en movilidad.