Tradición, práctica deportiva y atractivo turístico remontan las caudalosas aguas del Ulla cada temporada. El salmón atrae a cientos de pescadores hasta las riberas, deseosos de sacar del cauce al mismísimo "rey". La elevada demanda de permisos para probar suerte en la pesca del monarca fluvial ha propiciado un juego de tronos. El coto salmonero de Pontevea cambiará su régimen de cara a la próxima temporada y se abre a la pesca con muerte, contando con un total de ocho permisos por jornada.

Atendiendo a estos cambios y, si el número de permisos de pesca por día se mantiene como en la última temporada, el Ulla brindará en 2017 a los amantes de la pesca del salmón un total de 28 permisos por jornada para tratar de apresar al plateado en los cotos tradicionales. A falta de conocer si la normativa para la próxima campaña introduce algún otro cambio, se espera que sean ocho los permisos diarios en el coto de Santeles, seis en Sinde, otros seis en el de Ximonde y ocho en Pontevea.

A mayores, los cotos destinados a la pesca sin muerte, en los que la pieza ha de ser devuelta al río, el de Deza tendría 10 permisos por jornada y el mítico coto de Couso sumaría otros seis. Ello se traduce en 16 autorizaciones por día para esta modalidad deportiva.

En base a las estadísticas confeccionadas por la web especializada en pesca fluvial Ás orillas do Ulla, de los 1.650 permisos de pesca con muerte ofertados en la provincia de Pontevedra en la última temporada, 1.091 fueron reservados, si bien de los 5.544 autorizaciones de pesca sin muerte ofertadas en el mismo ámbito geográfico solamente se reservaron 186, lo que supondría un 3.35%.

La misma fuente aporta datos sobre el comportamiento de los cotos del Ulla en este sentido. Explica que en el de Santeles de reservaron 299 permisos, de los 528 disponibles. En el coto de Sinde los permisos reservados fueron 396, todos los disponibles, situación compartida con Ximonde, donde se reservaron las 396 autorizaciones disponibles para la pesca de salmón. En base a los datos cotejados por Ás orillas do Ulla, la situación fue bien diferente en los cotos de pesca sin muerte, donde el número de permisos solicitados fue prácticamente simbólico en relación a la cantidad de autorizaciones disponibles.

El cupo de capturas autorizado en la última temporada para las aguas del Ulla se situó en 60 salmones. De nuevo Ximonde se llevó la palma. Los pescadores obtuvieron en los puestos de este coto nada menos que 54 de los ejemplares capturados. Santeles aportó cuatro y Sinde otros dos.

La temporada salmonera en el Ulla se extiende del 1 de mayo al 31 de julio. Los meses de mayo y junio arrojaron el mayor volumen de capturas, con 28 y 32 salmones, respectivamente.

Ás orillas do Ulla aporta también las estadísticas en lo que a técnica de captura se refiere durante la última campaña. Indica esta publicación especializada que por primera vez se cerró la campaña sin alguna captura a mosca. La cucharilla sacó del Ulla a 37 salmones, mientras que otros 22 escogieron el cebo. Un único ejemplar cayó a rapala.

La misma web subraya que el coto de Ximonde fue el que más capturas registró durante la campaña salmonera del 2016 en toda España con sus 54 salmones precintados. En segunda posición quedó el coto del Brezo, en el río Sella, con 42 plateados y en tercera posición, con 37 capturas, quedó el coto del Golondroso, también perteneciente al río Sella. Las cifras de Ximonde serían mayores si se contabilizasen lo salmones pecados sin muerte.