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Francisco Xavier Pérez Vázquez, 'Narf:' "En nuestra sociedad eres más productivo si generas basura que si no haces nada"

"África te devuelve a un tiempo que nos perteneció a nosotros, porque aquí no fuimos tan distintos a ellos"

Fran Pérez, Narf, en una reciente actuación. // Adrián Cunha

Su presencia en el Womex de Santiago de Compostela del pasado mes de octubre, formando pareja artística con el grupo mozambiqueño Timbila Muzimba, le convirtió en uno de los artistas más valorados del festival. Fran Pérez, más conocido como Narf, recibe estos días el cariño de "toda la gente" mientras batalla con una reciente enfermedad que le ha obligado a suspender de forma temporal todos sus proyectos. De todas formas, Narf asegura estar "bien de ánimo" y ya piensa en regresar al trabajo.

-¿Abrumado por tantas muestras de afecto? ¿Se lo esperaba?

-Es un momento importante porque, también, compruebas la trascendencia y la dimensión que puede tener esa parte más pública relacionada con cantar canciones. Al final, te das cuenta de que se produce una relación afectiva entre la gente y tú que es muy interesante. De repente, en momentos así asoman y se agradecen, por supuesto.

-¿Cómo vivió el éxito que supuso su paso por el Womex?

-La verdad es que presentamos un proyecto extraordinario y, sin duda, fue el trabajo más relevante de los últimos tiempos porque son de esos proyectos que tienen una implicación internacional. Trabajas con un lanzamiento musical que tiene otros plazos distintos a los habituales. Por eso, es perfectamente compaginable con mi actual convalecencia. A partir de entonces, se abrieron toda una serie de oportunidades que surgieron tras el éxito que cosechamos en Santiago.

-¿Le sorprendió la gran acogida que tuvo el proyecto?

-La verdad es que nosotros hicimos el proyecto un poco de una manera natural, que es como a mi me gusta siempre enfocar los trabajos en los que me implico. Una vez que el Womex pasaba por Santiago lo aprovechamos para tender un puente, pero este es un proyecto que yo llevo desarrollando desde hace muchos años. De hecho, ahora, lo que estábamos celebrando fue el décimo aniversario de nuestra primera alianza. Yo, durante los meses de abril y mayo pasados, estuve en Mozambique haciendo una presentación atípica porque éramos un grupo de música tradicional mozambiqueña en fusión con un artista europeo dentro de un festival de música clásica. Fue una muestra muy interesante de como la música tradicional de Mozambique puede tener dimensiones de grandeza cuando se mezcla con otras fuentes. Por eso fui invitado a este festival donde había una orquesta africana tocaba a Schubert, a Mozart o a Beethoven, por ejemplo, y uno de los días lo dedicaron a la música tradicional de Mozambique pero con un artista extranjero, que era mi caso.

-O sea que el proyecto llegó cocinado a Santiago, ¿no?

-Realmente, nosotros teníamos el proyecto en marcha y fue por eso que pensamos que era un buen momento para presentarlo en el Womex, pero no porque estuviera enfocado a ese festival internacional. Se puede decir que este trabajo forma parte de nuestro devenir natural, y por eso creo que el espectáculo estaba perfectamente maduro, perfectamente preparado, y lleno de mucha conexión y de mucha música y de mucha verdad. No es un trabajo hecho para impresionar en ese momento, sino algo que tenía una historia y un bagaje, y por eso tuvo un éxito tan rotundo.

-¿Qué tiene África para que tantos artistas europeos recalen alguna vez en su vida para fusionar su música con los sones de ese inmenso continente?

-No pretendo querer asumir ahora labores de erudito sobre el tema porque no lo soy, simplemente soy un amante viajero que tuve la fortuna durante los últimos 20 años de tener bastantes encuentros musicales, lo que te permite entrar de forma diferente en los lugares, no tanto como un turista o un observador extranjero. Lo cierto es que tengo reflexionado mucho sobre ello. Nosotros vivimos en estos tiempos un poco deslumbrados por nuestro propio norte, como si ese norte, nuestro progreso, nuestra economía capitalista fuese una cosa tan deslumbrante, y algunas veces no nos damos cuenta de que en realidad lo que estamos es separándonos de nosotros mismos en cuanto personas y seres humanos que somos. Vivimos en una sociedad en la que, por ejemplo, eres más productivo si estás produciendo basura que si no haces nada. Simplemente estás reflexionando, pensando y parece que eres más productivo tirando bolsas o latas. Es todo un poco absurdo y pienso que a veces estamos inmersos en una vorágine un poco loca. Lo que tiene África es que nos devuelve a un tiempo que también nos perteneció a nosotros porque aquí no fuimos tan diferentes de como son ahora allí. No siempre un desarrollo económico está asociado a un desarrollo mental o personal. De repente, en una economía más apretada tienes más tiempo para vivir tu propia humanidad, reflexionar de otra manera, pasar la tarde observando los colores de los árboles en otoño, por ponerte un ejemplo. Esto puede ser algo realmente maravilloso y absolutamente productivo para tu espíritu aunque no estés generando un movimiento comercial ni nada parecido.

-¿Qué le gustaría hacer en cuanto recupere la salud?

-El movimiento siempre se demuestra andando. Ahora mismo estamos trabajando un poco en diferentes planos. Por una parte, como te decía, lo sucedido en Womex podría tener su continuidad el próximo verano con la vuelta de los festivales. Seguramente, retomaré también algo que tuvimos que suspender por mi enfermedad, como es el proyecto que tenía conjuntamente con Uxía. Nos quedó pendiente un concierto que teníamos previsto realizar con Juan Perro en la sala Galileo Galilei de Madrid, y también una gira que nos iba a llevar a Bilbao, Madrid, Barcelona, Manresa y otras partes de España. Estábamos con la rama hispana de este proyecto, que espero llevar adelante en cuanto esté recuperado. Además de todo esto, yo ya estoy preparando temas para un nuevo disco personal porque paralelamente de todos los trabajos que haces, uno tiene que ir llenando de contenidos con su propia música y creando nuevas canciones. Yo ya estoy ahora mismo componiendo temas nuevos. Esos son los tres frentes que me gustaría retomar cuanto antes.

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