El BNG dezano se reunió ayer a los pies del peaje de la AP-53 en Silleda para denunciar la situación por la que pasa el vial, argumentando una subida del precio del 70% que ya alcanza los 5,95 euros en turismo en el recorrido Lalín Santiago de Compostela. Este encuentro nacionalista coincidió como la primer visita del diputado Luis Bará a la comarca.

El motivo no era otro que manifestar su desconformidad con la situación que está viviendo la AP-53 con unos precios desorbitados para los nacionalistas. De esta manera pretende dar visibilidad una situación que llevarán tanto a los concellos afectados como al mismo Parlamento de Galicia. Así lo hizo saber el diputado por Pontevedra Luis Bará, que recalcó que "se hará una campaña de ofensiva política para intentar la transferencia de competencia al parlamento gallego". Tras realizar el rescate de la concesión, el grupo nacionalista buscará la supresión del peaje, que según apuntan, desde su inicio, ha aumentado su precio un 70%. De todas formas, esta no será la única campaña que realizarán, segundo apunta Bará, pues también realizarán una serie de reuniones con diferentes grupos del tejido económico de la comarca dezana para buscar "el máximo apoyo posible en esta cuestión que es trascendental para las comunicaciones y el desarrollo económico", argumenta. En este sentido, Bará apuntó que se pedirá, en todo caso, un rescate con fondos estatales, explicando que "son unas reivindicaciones parecidas a las realizadas con la AP-9".

Por su parte, el portavoz municipal del BNG de Lalín, Francisco Vilariño, asegura que en encuentro "se enmarca la necesidad de a transferencia y la supresión del peaje con la finalidad de vertebral el país y acabar con ese carácter especulativo". Además sostiene que hubo un error en las condiciones en las que se hizo, llevando a un gasto de 60.000 millones de euros en una estructura que no es autonomica.

Vilariño hace hincapié en que "no hay una vía alternativa, puesto que la N-525 es una vía obsoleta y el hecho de que se haga un tercer carril es casi impensable", manifiesta. Además denuncia que "es una de las autopista más caras del Estado, donde ni los usuarios habituales tienen descuentes, es más incluso se llega a pagar por kilómetros que no se hacen". Asimismo sostiene que es necesario liberar de una vez la gran cantidad de tráfico que recorre habitualmente por la N-525.