Las dificultades para acceder al mercado laboral hacen indispensable, cada vez más, que los aspirantes sean mano de obra cualificada y con un alto nivel de formación académica. Pero tener una titulación universitaria tampoco garantiza la consecución de un empleo. Así lo demuestran los datos generales en el conjunto del Estado o en Galicia y Deza y Tabeirós no es una excepción. Un 17% de los parados actuales, cerca de 700 sobre los 4.039 totales. Son personas con formación universitaria. Si miramos lo que ocurrió en septiembre del año pasado, el porcentaje es, aunque casi idéntico, un poco superior ahora.
En Lalín constan para la Consellería de Traballo exactamente 212 vecinos con estudios superiores en paro, que a su vez son el 15,6% del total. La proporción en Silleda sube hasta el 18% y son 88. En Vila de Cruces son el 13% y el 18,6 por ciento en Rodeiro. En Agolada hay 6 universitarios en paro y uno menos en Dozón. Casi el 20% del total de desocupados estradenses tienen estudios superiores y son 288. En Forcarei y Cerdedo, según los últimos datos del paro, aparecen una veintena y 14 personas con máxima formación sin un puesto de trabajo.