Hace un año que el equipo que lidera José Rodríguez accedió a la junta directiva de la Sociedade de Caza de Dozón. Desde entonces está inmerso en un intenso programa de recuperación de, sobre todo, la población de perdiz. Esta iniciativa ya empieza a dar sus frutos. "Mi compañero y yo vimos una bandada de 23 perdices sobre un prado, y más tarde otra de 12. La verdad es que hubo un buen rastro y bastante densidad", comenta Rodríguez. La liebre es otra de las especies que lleva camino de consolidarse en las casi 7.500 hectáreas de monte de caza de Dozón. Ayer más de uno cazó esta codiciada pieza. Fueron decenas los cazadores que se decidieron a estrenar ayer la temporada. "En Pena de Francia había una veintena de escopetas", indica el presidente. También hubo quien decidió aprovechar el domingo para salir a cazar jabalí. En el municipio es conocida una manada de 12 animales culpable de los daños que se detectaron en diversas fincas. Al final de la jornada, A Gouxa fue el enclave escogido por muchos para exhibir y comparar sus piezas.