El alcalde de Silleda, Manuel Cuiña, remitió a la Consellería de Cultura una nueva petición en la que solicita su intervención en el monasterio de Carboeiro. Silleda ya hizo esta solicitud en julio, en vista de que desde la visita de técnicos de Patrimonio, en septiembre de 2015, aún no se concretaron con la Xunta qué medidas de actuación van a tomarse.

La petición se acompaña del informe técnico que se realizó entonces, con el diagnóstico de los propios técnicos de la Xunta, "y en el que se observa el actual deterioro del conjunto de Carboeiro". En dicho informe se señala que, en caso de que el Concello no pueda financiar estas actuaciones, debería estudiarse la intervención por parte de otras administraciones, sobre todo en las obras de mayor urgencia, como son el muro de contención, la cubierta del edificio monacal o la realización de un estudio de conservación de las portadas y las pinturas murales del ábside del templo. Se detecta, también filtración de agua en las cubiertas y el deterioro de las figuras de los arquivoltas (sobre todo en la fachada principal del edificio). Cuiña agradece que Cultura respondiese con celeridad el año pasado a la solicitud de una visita de técnicos, y confía en que ahora la administración autonómica concrete cuanto antes las actuaciones que se llevarán a cabo en el enclave.

Cuiña insiste en la relevancia de este enclave arquitectónico en el turismo dezano, puesto que recibe al año la visita de millares de personas llegadas incluso de diversos puntos del extranjero. Añade que fue declarado Ben de Interese Cultural (BIC) hace casi 100 años, en 1931, de modo que su importancia trasvasa desde hace tiempo el ámbito local. Por eso, la colaboración de la Xunta es fundamental para velar por la conservación correcta "de todo un emblema que es patrimonio de todos", concluye.