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Vecinos denuncian la presencia de flor de azufre en las calles de Lalín

El producto es utilizado con el fin de evitar las micciones de perros

Flor de azufre en la calle Pintor Laxeiro. // Bernabé/Javier Lalín

En estos días se ha podido ver en diversas calles del casco urbano lalinense, cierta cantidad de polvo colocado en las esquinas de las entradas de algunos edificios que destaca más que nada por su pigmentación amarilla. Este producto es conocido como flor de azufre y es comúmente utilizada para evitar que los perros orinen en aquel lugar en el que se echa, puesto que su fuerte olor aleja al animal que pretende marcar su territorio.

Este material, utilizado también en la horticultura, ya que es un excelente repelente de insectos como por ejemplo para matar al pulgón de las plantas, está prohibido en diferentes municipios de España para esta finalidad en cuestión debido a su toxicidad. Sin embargo en Lalín, segundo técnicos del área de Medio Ambiente, "no se recoge nada al respecto en la ordenanza municipal, pero sí que puede ser interpuesta una sanción en caso de una denuncia formal, porque es perjudicial para la salud de personas y animales y además se está ensuciando la calle", explican. Además, destaca que "a la hora de limpiarlo, con el agua también podría ser contaminante a producir algún tipo de reacción". Por su parte, miembros de la Policía Local de Lalín aseguran que por lo de ahora ninguna persona ha denunciado o se ha quejado por la proliferación de este producto en las aceras y paredes de los edificios del callejero lalinense.

En este sentido, la mayoría de los municipios está prohibido abandonar en la vía pública o en cualquier espacio público cualquier tipo de residuo o cualquier otra conducta que pueda ensuciar la vía o ir en detrimento de su higiene y aseo. Pero en cuanto a la toxicidad del material se recoge que algunos de los efectos en la salud tras su exposición son: Úlceras en la piel, conjuntivitis, inflamación de la mucosa nasal, dificultades en la respiración o asma, entre otras cosas. Además, el material es considerado muy inflamable pudiendo originar incluso mezclas explosivas en contacto con el aire o con los oxidables.

Expertos fitosanitarios, sin embargo, señalan que "aunque su toxicidad no es execivamente dañina sí que existe y está latente", no obstante, también destaca que "así como es perjudicial para salud estos residuos de carácter químico, también los son las micciones de los animales por los efectos de la insalubridad".

Asimismo, desde asociaciones en defensa de los animales aseguran que su uso es incluso contraproducente, puesto que en muchos casos este material no evitan que los animales orinen, sino que lo hagan reiteradamente y que los pájaros lleguen a comérselo. En cualquier caso, si una persona o animal entra en contacto con este residuo aconsejan que se acuda al médico o al veterinario rápidamente.

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