El programa de terapia y estimulación temprana -neurociencia aplicada a la educación- definido por María del Carmen Matalobos y Marina Tubío de las clínicas Alameda y Casiopea de A Estrada y Bertamiráns para potenciar las capacidades y las habilidades infantiles busca dar alas a las inteligencias múltiples. Lo hará a través de circuitos con distintas zonas de desarrollo de corta duración -para que los niños mantengan la atención- en los que se combinan las terapias de relajación y del juego (Brain Gym) procedentes de la reflexología (con Matalobos) y los distintos módulos de desarrollo de las distintas áreas cerebrales (con Tubío) con sesiones en las que la se utilizarán aves y perros entrenados para la intervención terapéutica o educativa así como elementos de electrónica y de robótica.

Ayer, Matalobos, Tubío y el responsable de la firma Rapiñas do Salnés, Evaristo González Rodiño, para seguir ultimando el programa, cuyos detalles trascenderán mañana, a las 19.00 horas, en una charla abierta al público que tendrá lugar en el MOME González Rodiño dispone de águilas, halcones, búhos y lechuzas que pondrá al servicio del programa. Ya tiene experiencia en el trabajo con niños rebeldes o con problemas de atención -a los que se trata de incentivar así como de actuar sobre su impulsividad y trabajar sobre su sentido de la responsabilidad- y en el ámbito de la geriatría. Lleva 20 años ligado a la cetrería y ello le ha reportado satisfacciones como ver que una anciana que llevaba 8 meses sin hablar volvió a hacerlo cuando le acercaron un cernícalo común.

Por su parte, la veterinaria Alejandra Fernández y la psicóloga especializada en estimulación temprana Carmen López potenciarán el desarrollo de los niños de 0 a 8 años utilizando caniches adiestrados para intervenciones para estimular a los niños y trabajar con ellos la psicomotriidad, la memoria e incluso actividades educativas como la lectura.

También participará del programa Marcos Saavedra de Vermislab. Este docente, ingeniero en Diseño de Producto de Vermislab, fomentará la creatividad en los niños. Al principio incidirá en el trabajo en equipo, la inteligencia emocional, la percepción y la confianza. Luego abordará técnicas de creatividad y experimentación sin utilizar la tecnología. Y luego, les enseñará electrónica básica y robótica, con escornabot de software y hardward libre hecho en Galicia.

Todo ello conformará un proyecto rupturista y pionero que busca aprovechar la plasticidad cerebral infantil para potenciar la inteligencia de los niños.